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Proverbios 11:11 - Biblia Martin Nieto

Por la bendición de los hombres rectos se eleva una ciudad, la boca de los malvados la destruye.

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Biblia Reina Valera 1960

Por la bendición de los rectos la ciudad será engrandecida; Mas por la boca de los impíos será trastornada.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

Los ciudadanos íntegros son de beneficio para la ciudad y la hacen prosperar, pero las palabras de los perversos la destruyen.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

La ciudad prosperará mientras los justos la bendigan; su ruina se deberá a las intrigas de los malvados.

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La Biblia Textual 3a Edicion

Con la bendición de los rectos la ciudad prospera, Pero la boca de los impíos la arruina.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

Por la bendición de los rectos prospera la ciudad, por la boca de los malvados se hunde.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Por la bendición de los rectos la ciudad es engrandecida; mas por la boca de los impíos es trastornada.

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Proverbios 11:11
14 Tagairtí Cros  

No fuisteis vosotros los que me enviasteis aquí, sino Dios. Él me ha hecho padre del Faraón y señor de toda su casa, gobernador de todo el país de Egipto.


Se encontraba allí un hombre perverso, llamado Sebá, hijo de Bicrí, un benjaminita, que tocó la trompeta y dijo: 'Nosotros no tenemos parte con David, nosotros no tenemos herencia con el hijo de Jesé. ¡Cada uno a sus tiendas, Israel!'.


Él salva al inocente; tú serás salvo si tus manos son puras.


Por la prosperidad de los justos se alegra la ciudad; cuando perecen los injustos, hay fiesta.


El que desprecia a su prójimo es un insensato, el hombre prudente calla.


La justicia eleva a una nación, mas la injusticia hunde los pueblos.


Por los delitos de un país son muchos sus gobernantes, pero con un hombre inteligente y sabio el orden dura.


Los violentos agitan la ciudad, los sabios calman la ira.


Había en ella un hombre pobre, pero sabio, que salvó la ciudad con su sabiduría; mas nadie ha conservado el recuerdo de aquel hombre.


La lengua es también de fuego; el mundo de la injusticia. La lengua puesta en medio de nuestros miembros infecta todo nuestro cuerpo y prende fuego al curso de nuestra vida, cuando ella está incendiada con el fuego del infierno.