Bíobla ar líne

Fógraí


An Bíobla ar fad Sean-Tiomna Tiomna Nua




Mateo 8:15 - Biblia Martin Nieto

y desapareció la fiebre; ella se levantó y se puso a atenderle.

Féach an chaibidil
Taispeáin Interlinear Bible

Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

Y tocó su mano, y la fiebre la dejó; y ella se levantó, y les servía.

Féach an chaibidil

Biblia Nueva Traducción Viviente

Jesús le tocó la mano, y la fiebre se fue. Entonces ella se levantó y le preparó una comida.

Féach an chaibidil

Biblia Católica (Latinoamericana)

Jesús le tocó la mano y se le pasó la fiebre. Ella se levantó y comenzó a atenderle.

Féach an chaibidil

La Biblia Textual 3a Edicion

y tocando su mano, la fiebre la dejó; y fue levantada, y lo servía.

Féach an chaibidil

Biblia Serafín de Ausejo 1975

le tocó la mano y se le quitó la fiebre. Ella se levantó y se puso a servirle.

Féach an chaibidil

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Y tocó su mano, y la fiebre la dejó; y ella se levantó, y les servía.

Féach an chaibidil
Aistriúcháin eile



Mateo 8:15
15 Tagairtí Cros  

y sucedió que mientras unos hombres estaban enterrando a un muerto, divisaron una banda, echaron al hombre en el sepulcro de Eliseo y escaparon. Apenas aquel hombre tocó los huesos de Eliseo, revivió y se puso en pie.


Tocó con él mi boca y dijo: Mira, esto ha tocado tus labios: tu maldad queda borrada, tu pecado está perdonado.


y le suplicaban que les dejase tan sólo tocar la orla de su manto. Y todos los que lo tocaron se curaron.


Jesús se compadeció, tocó sus ojos, y al punto recobraron la vista y se fueron tras él.


Cuando Jesús llegó a casa de Pedro, vio a la suegra de éste, que estaba en cama y con fiebre. Él la agarró de la mano


Al anochecer, le presentaron muchos endemoniados; y con su palabra echó a los espíritus y curó a todos los enfermos,


Jesús extendió la mano, lo tocó y dijo: 'Quiero. Queda limpio'. Y al instante quedó limpio de su lepra.


Una mujer, que padecía hemorragias desde hacía doce años, se acercó por detrás y tocó la orla de su manto,


Entonces les tocó los ojos, diciendo: 'Hágase en vosotros según vuestra fe'. Y se les abrieron los ojos.


Salieron de la sinagoga y fueron a la casa de Simón y de Andrés, con Santiago y Juan.


Él, compadecido, extendió la mano, lo tocó y le dijo: 'Quiero, queda limpio'.


Él la tomó de la mano y dijo: 'Niña, despierta'.