Bíobla ar líne

Fógraí


An Bíobla ar fad Sean-Tiomna Tiomna Nua




Mateo 22:9 - Biblia Martin Nieto

Id a las encrucijadas de los caminos y a todos los que encontréis convidadlos a la boda.

Féach an chaibidil
Taispeáin Interlinear Bible

Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

Id, pues, a las salidas de los caminos, y llamad a las bodas a cuantos halléis.

Féach an chaibidil

Biblia Nueva Traducción Viviente

Ahora salgan a las esquinas de las calles e inviten a todos los que vean”.

Féach an chaibidil

Biblia Católica (Latinoamericana)

Vayan, pues, a las esquinas de las calles e inviten a la fiesta a todos los que encuentren'.

Féach an chaibidil

La Biblia Textual 3a Edicion

Id pues a las encrucijadas de los caminos, y llamad a la fiesta de bodas a cuantos halléis.

Féach an chaibidil

Biblia Serafín de Ausejo 1975

Salid, pues, a las encrucijadas de los caminos, y a todos cuantos encontréis, convidadlos al banquete'.

Féach an chaibidil

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Id, pues, a las salidas de los caminos, y llamad a las bodas a cuantos halléis.

Féach an chaibidil
Aistriúcháin eile



Mateo 22:9
16 Tagairtí Cros  

¡Hiere a derecha y a izquierda, dondequiera se vuelva tu hoja!


No te plantes en las encrucijadas para matar a los que huyen; no entregues a sus supervivientes el día de la angustia.


Le dijeron: Porque nadie nos ha contratado. Él les dijo: Id también vosotros a la viña.


Los criados salieron a los caminos y recogieron a todos los que encontraron, malos y buenos, y la sala de bodas se llenó de invitados.


Luego dijo a sus criados: El banquete de bodas está preparado, pero los invitados no eran dignos.


y que hay que predicar en su nombre el arrepentimiento y el perdón de los pecados a todas las naciones, comenzando por Jerusalén.


Así nos lo mandó el Señor: Te he puesto como luz de las naciones, para que lleves la salvación hasta el fin de la tierra'.


A mí, el más insignificante de todos los cristianos, se me ha concedido el privilegio de evangelizar a los paganos, de anunciar la incalculable riqueza de Cristo,


El Espíritu y la esposa dicen: 'Ven'. El que escuche, diga: 'Ven'. El que tenga sed, que venga; y el que quiera, tome gratuitamente del agua de la vida.