Unos tres meses después le contaron a Judá: 'Tu nuera Tamar se ha prostituido y ha quedado encinta'. Judá dijo: 'Que sea sacada y quemada'.
Mateo 1:19 - Biblia Martin Nieto José, su marido, que era un hombre justo y no quería denunciarla, decidió dejarla en secreto. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 José su marido, como era justo, y no quería infamarla, quiso dejarla secretamente. Biblia Nueva Traducción Viviente José, su prometido, era un hombre justo y no quiso avergonzarla en público; por lo tanto, decidió romper el compromiso en privado. Biblia Católica (Latinoamericana) Su esposo, José, pensó despedirla, pero como era un hombre bueno, quiso actuar discretamente para no difamarla. La Biblia Textual 3a Edicion Y José su marido, que era justo, pero no quería denunciarla, se propuso repudiarla en secreto.° Biblia Serafín de Ausejo 1975 José, su esposo, que era un hombre recto, no quiso denunciarla sino que determinó repudiarla en privado. Biblia Reina Valera Gómez (2023) y José su marido, como era un hombre justo y no quería infamarla, quiso dejarla secretamente. |
Unos tres meses después le contaron a Judá: 'Tu nuera Tamar se ha prostituido y ha quedado encinta'. Judá dijo: 'Que sea sacada y quemada'.
Ésta es la historia de Noé: Noé era un hombre justo, íntegro, y entre sus compañeros seguía los caminos de Dios.
Si uno se acuesta con una mujer que pertenece a otro como esclava y concubina sin que haya sido rescatada ni puesta en libertad, será castigado; pero no con la muerte, pues la mujer no era libre.
En cuanto al hombre que comete adulterio con una mujer casada: el hombre que comete adulterio con la mujer de su prójimo, será castigado con la muerte, él y la mujer.
Ellos dijeron: 'Moisés mandó escribir un acta de divorcio y despedirla'.
porque Herodes respetaba a Juan, pues reconocía que era un hombre justo y santo, y lo protegía; cuando lo oía quedaba perplejo, pero lo escuchaba con gusto.
Había entonces en Jerusalén un hombre llamado Simeón, justo y piadoso, que esperaba la liberación de Israel: El Espíritu Santo estaba en él,
Ellos dijeron: 'El centurión Cornelio, varón justo y temeroso de Dios, que goza de la reputación de todos los judíos, ha recibido aviso de un santo ángel para que te mande llamar y vayas a su casa y oír lo que tengas que decirle'.
Al llegar el día, los marineros no reconocieron aquella tierra; pero divisaron una ensenada que tenía playa y decidieron hacer todo lo posible para varar allí el barco.
Convencido de esto, quise empezar mi viaje por vosotros para haceros una doble visita:
Pero si la acusación es verdadera y no se han encontrado en la joven las pruebas de la virginidad,