Temed al Señor, sed justos, porque el Señor no tolera la injusticia, la parcialidad y el soborno'.
Lucas 20:21 - Biblia Martin Nieto Le preguntaron: 'Maestro, sabemos que hablas y enseñas con rectitud, que no te importa nada el qué dirán y que enseñas de verdad el camino del Señor. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y le preguntaron, diciendo: Maestro, sabemos que dices y enseñas rectamente, y que no haces acepción de persona, sino que enseñas el camino de Dios con verdad. Biblia Nueva Traducción Viviente —Maestro —le dijeron—, sabemos que dices y enseñas lo que es correcto y no te dejas influir por lo que piensan otros. Enseñas con verdad el camino de Dios. Biblia Católica (Latinoamericana) Le preguntaron: 'Maestro, sabemos que hablas y enseñas con rectitud, que no te dejas influenciar por nadie, sino que enseñas con absoluta franqueza el camino de Dios. La Biblia Textual 3a Edicion Y le preguntaron, diciendo: Maestro, sabemos que hablas y enseñas rectamente y que no haces acepción de personas, sino que enseñas el camino de Dios con verdad: Biblia Serafín de Ausejo 1975 Hiciéronle, pues, esta pregunta: 'Maestro, sabemos que hablas y enseñas con rectitud y que no te importa la condición de las personas, sino que enseñas realmente el camino de Dios. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y le preguntaron, diciendo: Maestro, sabemos que dices y enseñas rectamente, y que no haces acepción de personas; sino que enseñas el camino de Dios con verdad. |
Temed al Señor, sed justos, porque el Señor no tolera la injusticia, la parcialidad y el soborno'.
Que no hace acepción de prepotentes ni considera al rico más que al pobre, porque son todos obra de sus manos.
Auxilio, Señor, que ya no hay hombres fieles, la lealtad ya no existe entre los hombres;
Le enviaron discípulos suyos con los herodianos a decirle: 'Maestro, sabemos que eres sincero, que enseñas de verdad el camino de Dios y que no te importa nada el qué dirán, porque no tienes respetos humanos.
Llegaron y le dijeron: 'Maestro, sabemos que eres sincero y que no te importa nada el qué dirán, porque no tienes respetos humanos y enseñas de verdad el camino de Dios. ¿Es lícito pagar el impuesto al césar o no? ¿Lo debemos dar o no?'.
Se quedaron en acecho y enviaron espías que aparentaban ser justos, para cazarlo en alguna palabra y así entregarlo al poder y a la autoridad del gobernador.
Una noche fue a ver a Jesús y le dijo: 'Maestro, sabemos que Dios te ha enviado para enseñarnos, porque nadie puede hacer los milagros que tú haces si no está Dios con él'.
Nosotros no hacemos negocio con la palabra de Dios, como hacen muchos, sino que la predicamos con sinceridad, de parte de Dios, en presencia de Dios, en unión con Cristo.
¿A quién busco agradar, a los hombres o a Dios? Si tratara de agradar a los hombres, no agradaría a Dios
Los dirigentes no me añadieron nada -lo que ellos fueron antes, no me interesa, pues Dios no juzga por las apariencias-,