Da parte a siete y aun a ocho, porque no sabes qué desgracias pueden venir sobre la tierra.
Lucas 12:17 - Biblia Martin Nieto Y él pensó: ¿Qué haré, pues no tengo donde almacenar mis cosechas? Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y él pensaba dentro de sí, diciendo: ¿Qué haré, porque no tengo dónde guardar mis frutos? Biblia Nueva Traducción Viviente Se dijo a sí mismo: “¿Qué debo hacer? No tengo lugar para almacenar todas mis cosechas”. Biblia Católica (Latinoamericana) Pensaba: ¿Qué voy a hacer? No tengo dónde guardar mis cosechas. La Biblia Textual 3a Edicion y él razonaba dentro de sí,° diciendo: ¿Qué haré?° Porque no tengo donde más guardar° mis frutos. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Y discurría para sí de esta forma: '¿Qué voy a hacer, si ya no tengo dónde almacenar mis cosechas?'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) y él pensaba dentro de sí, diciendo: ¿Qué haré, porque no tengo dónde almacenar mis frutos? |
Da parte a siete y aun a ocho, porque no sabes qué desgracias pueden venir sobre la tierra.
repartir tu pan con el hambriento, hospedar a los pobres sin techo, vestir al que veas desnudo y no eludir al que es tu propia carne.
Da a quien te pida, y no vuelvas la espalda al que desea que le prestes algo'.
Se levantó entonces un doctor de la ley y le dijo para tentarlo: 'Maestro, ¿qué debo hacer para heredar la vida eterna?'.
Y les dijo una parábola: 'Las fincas de un hombre rico dieron una gran cosecha.
Y se dijo: Destruiré mis graneros, los ampliaré y meteré en ellos todas mis cosechas y mis bienes.
Después dijo a sus discípulos: 'Por eso os digo: No os angustiéis por vuestra vida pensando qué vais a comer, ni por vuestro cuerpo, qué vais a poneros.
Vended lo que tengáis y dad limosna con ello. Haceos bolsas que no se gasten y riquezas inagotables en el cielo, donde no entra ningún ladrón, ni roe la polilla;
Entonces el administrador se puso a pensar: ¿Qué voy a hacer, pues mi amo me quita la administración? Cavar, ya no puedo; mendigar, me da vergüenza.
Y yo os digo: Haceos amigos con el dinero injustamente adquirido, para que, cuando os falte, os reciban en las moradas eternas.
Al oírlo Jesús, le dijo: 'Aún te queda una cosa por hacer: Vende todo lo que tienes, dáselo a los pobres y tendrás un tesoro en el cielo; después, ven y sígueme'.
Y le contestó: Muy bien, criado bueno; puesto que has sido fiel en lo poco, recibe el gobierno de diez ciudades.
Y él contestaba: 'El que tenga dos túnicas reparta con el que no tiene ninguna, y el que tiene alimentos que haga igual'.
Al oírle, se conmovieron profundamente y dijeron a Pedro y a los demás apóstoles: '¿Qué debemos hacer, hermanos?'.
socorred las necesidades de los creyentes, practicad la hospitalidad.
A los ricos de este mundo recomiéndales que no sean orgullosos y que no pongan su esperanza en las riquezas caducas, sino en Dios, que nos provee abundantemente de todas las cosas para que disfrutemos de ellas;
En esto hemos conocido el amor: en que él ha dado su vida por nosotros; y nosotros debemos dar también la vida por nuestros hermanos.