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Levítico 23:17 - Biblia Martin Nieto

Llevaréis de vuestra casa, para ofrecerlos con el rito de presentación, dos panes de ocho kilos de flor de harina cocidos con levadura. Son las primicias para el Señor.

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Biblia Reina Valera 1960

De vuestras habitaciones traeréis dos panes para ofrenda mecida, que serán de dos décimas de efa de flor de harina, cocidos con levadura, como primicias para Jehová.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

Desde dondequiera que vivas, llevarás dos panes para ser levantados delante del Señor como ofrenda especial. Prepara cada uno de los panes con cuatro litros de harina selecta, y hornéalos con levadura. Serán una ofrenda al Señor de la primera de tus cosechas.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

Traerán de sus casas, para ofrecerlos, dos panes de dos décimas de flor de harina cocidos con levadura: éstas serán sus primicias para Yavé.

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La Biblia Textual 3a Edicion

Desde vuestros asentamientos llevaréis dos panes de dos décimas de flor de harina horneados con levadura, como ofrenda mecida, como primicias a YHVH.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

Llevaréis de vuestras casas dos panes cocidos con levadura, cada uno de dos décimas de flor de harina, que ofreceréis con el rito del balanceo como primicias a Yahveh.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

De vuestras habitaciones traeréis dos panes para ofrenda mecida, que serán de dos décimas de flor de harina, cocidos con levadura, por primicias a Jehová.

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Levítico 23:17
22 Tagairtí Cros  

así como los primogénitos de nuestros hijos y de nuestros ganados, como está prescrito en la ley; los primogénitos de nuestras reses vacunas y de nuestro ganado menor, para presentarlos en el templo de nuestro Dios a los sacerdotes encargados del culto del templo de nuestro Dios;


Harás lo mismo con el primogénito de tus vacas y de tus ovejas. Siete días permanecerá con su madre, y al octavo me lo darás.


Guardarás también la fiesta de la siega, de las primicias de tus trabajos, de lo que hayas sembrado en el campo. Y la fiesta de la recolección, al terminar el año, cuando recojas de los campos el fruto de tus fatigas.


Llevarás a la casa del Señor, tu Dios, las primicias de los frutos de tu tierra. No cocerás el cabrito en la leche de su madre.


Guardarás la fiesta de las semanas, la de las primicias de la siega del trigo y la fiesta de la recolección al terminar el año.


Llevarás a la casa del Señor, tu Dios, lo más florido de las primicias de tu tierra. No cocerás un cabrito en la leche de su madre'.


Éstos pueden ser presentados al Señor como ofrenda de primicias, pero nunca podrán subir al altar como perfume agradable al Señor.


'Di a los israelitas: Cuando hayáis entrado en la tierra que os doy y hagáis la recolección, llevaréis al sacerdote la primera gavilla de vuestra cosecha.


Junto con el pan, ofreceréis en holocausto al Señor siete corderos de un año sin defecto, un novillo y dos carneros con la ofrenda y las libaciones: es una ofrenda quemada, un perfume agradable en honor del Señor.


Añadirá esta ofrenda a las hogazas de pan fermentado y al sacrificio de reconciliación ofrecido en acción de gracias.


Todo lo mejor del aceite, del mosto y del trigo; estas primicias que ellos ofrecen al Señor, te las doy.


Las primicias, que habrán de traer al Señor de todos los productos de su tierra, serán tuyas; todos los de tu casa podrán comer de ellas con tal que estén puros.


'El día de las primicias, cuando vayáis a presentar al Señor la ofrenda de los frutos nuevos en vuestra fiesta de las semanas, tendréis asamblea santa; no haréis ningún trabajo.


Les dijo otra parábola: 'El reino de Dios es semejante a la levadura que una mujer toma y la mete en tres medidas de harina hasta que fermenta toda la masa'.


No sólo ella, sino también nosotros, que tenemos las primicias del Espíritu, gemimos dentro de nosotros mismos, esperando la adopción filial, la redención de nuestro cuerpo.


Pero Cristo ha resucitado de entre los muertos como primicias de los que mueren.


Él nos ha engendrado según su voluntad por la palabra de la verdad, para que seamos como las primicias de sus criaturas.


Éstos son los que no se han manchado con mujeres, porque son vírgenes; éstos siguen al cordero adondequiera que va; fueron rescatados de entre los hombres como primicias para Dios y para el cordero;