Entonces la mujer dijo: '¿Por qué piensas tú de este modo contra el pueblo de Dios? El rey se hace culpable por las palabras que acaba de pronunciar, si no hace que vuelva el que ha huido de él.
Jueces 20:2 - Biblia Martin Nieto Los jefes de todo el pueblo, todas las tribus de Israel, asistieron a la asamblea del pueblo de Dios, cuatrocientos mil hombres de a pie que sabían manejar la espada. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y los jefes de todo el pueblo, de todas las tribus de Israel, se hallaron presentes en la reunión del pueblo de Dios, cuatrocientos mil hombres de a pie que sacaban espada. Biblia Nueva Traducción Viviente Los líderes de todo el pueblo, de todas las tribus de Israel —cuatrocientos mil guerreros armados con espadas—, ocuparon sus puestos en la asamblea del pueblo de Dios. Biblia Católica (Latinoamericana) Participaron en esta asamblea del pueblo de Dios los jefes del pueblo y todas las tribus de Israel: eran como cuatrocientos mil hombres que sabían manejar la espada. La Biblia Textual 3a Edicion Y los jefes de todo el pueblo, de todas las tribus de Israel, tomaron su puesto en la asamblea del pueblo de Dios, cuatrocientos mil hombres de a pie armados de espada. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Los príncipes de todo el pueblo y todas las tribus de Israel se presentaron a la asamblea del pueblo de Dios: cuatrocientos mil hombres de a pie armados de espada. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y los jefes de todo el pueblo, de todas las tribus de Israel, se hallaron presentes en la reunión del pueblo de Dios, cuatrocientos mil hombres de a pie que sacaban espada. |
Entonces la mujer dijo: '¿Por qué piensas tú de este modo contra el pueblo de Dios? El rey se hace culpable por las palabras que acaba de pronunciar, si no hace que vuelva el que ha huido de él.
Joab dio al rey el resultado del censo del pueblo: había en Israel ochocientos mil hombres de guerra que blandían la espada, y en Judá, quinientos mil.
El rey de Moab, viendo que la lucha era demasiado recia para sus fuerzas, tomó consigo setecientos hombres que empuñaban espada para abrir una brecha contra el rey de Edón, pero no lo consiguió.
en cuanto lo supieron, se reunieron en Silo para subir contra ellos y hacerles la guerra.
Los benjaminitas, venidos de todas las ciudades, sumaron veinticinco mil hombres diestros en el manejo de la espada, sin contar los de Guibeá.
Y los israelitas, prescindiendo de los de Benjamín, eran cuatrocientos mil, todos gente de guerra y diestros en el manejo de la espada;
Los de la tribu de Benjamín supieron que los israelitas se habían reunido en Mispá. Los israelitas preguntaron: 'Contadnos cómo se ha cometido este crimen'.
Zébaj y Salmuná estaban en Carcor con sus ejércitos, alrededor de quince mil hombres, todos los que habían quedado del ejército del oriente. Habían caído ciento veinte mil guerreros.
Les pasó revista en Bézec. Eran trescientos mil de Israel y treinta mil de Judá.