Salió también el rey de Israel y se apoderó de caballos y de carros, asestando un recio golpe a los sirios.
Jueces 11:33 - Biblia Martin Nieto Los derrotó desde Aroer hasta Minit, veinte ciudades, y hasta Abel Keramín. Fue una gran derrota, y los israelitas dominaron a los amonitas. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y desde Aroer hasta llegar a Minit, veinte ciudades, y hasta la vega de las viñas, los derrotó con muy grande estrago. Así fueron sometidos los amonitas por los hijos de Israel. Biblia Nueva Traducción Viviente Aplastó a los amonitas, devastó unas veinte ciudades desde Aroer hasta una zona cerca de Minit, y desde allí hasta Abel-keramim. De esa forma, Israel derrotó a los amonitas. Biblia Católica (Latinoamericana) Los persiguió desde Aroer hasta los alrededores de Minit, apoderándose de veinte pueblos, y hasta Abel-Queramim. Los amonitas sufrieron una derrota muy grande y en adelante quedaron sometidos a los israelitas. La Biblia Textual 3a Edicion Y les provocó una muy grande derrota desde Aroer hasta llegar a Minit, veinte villas, y hasta la vega de las viñas. Así fueron humillados los hijos de Amón ante los hijos de Israel. Biblia Serafín de Ausejo 1975 los derrotó desde Aroer hasta la entrada de Minit -veinte pueblos- y hasta Abel Queramín. Fue una aplastante derrota. Y así los amonitas quedaron humillados ante los israelitas. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y los hirió de grandísimo estrago desde Aroer hasta llegar a Minit, veinte ciudades; y hasta la vega de las viñas. Así fueron sometidos los hijos de Amón delante de los hijos de Israel. |
Salió también el rey de Israel y se apoderó de caballos y de carros, asestando un recio golpe a los sirios.
Contigo comerciaban Judá y la tierra de Israel; te daban a cambio trigo de Minit, perfumes, miel, aceite y bálsamo.
Desde Aroer, que está al borde del río Arnón, la ciudad que está en el valle, hasta Galaad, no hubo para nosotros ciudad inexpugnable. El Señor, nuestro Dios, las puso todas en nuestras manos.
Jefté marchó contra los amonitas y el Señor los entregó en sus manos.