Al cuarto mes, el día noveno del mes, la carestía era tan recia en la ciudad que no había pan para el pueblo.
Jeremías 52:6 - Biblia Martin Nieto El día nueve del mes cuarto, debido al hambre que se apoderaba de la ciudad y a la falta de víveres para la población, Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 En el mes cuarto, a los nueve días del mes, prevaleció el hambre en la ciudad, hasta no haber pan para el pueblo. Biblia Nueva Traducción Viviente Hacia el 18 de julio del año once del reinado de Sedequías, el hambre en la ciudad ya era muy intensa y se había agotado por completo lo último que quedaba de alimento. Biblia Católica (Latinoamericana) El día nueve del cuarto mes, cuando el hambre reinaba en la ciudad y la población no tenía ya nada más que comer, La Biblia Textual 3a Edicion En el mes cuarto, a los nueve días del mes, el hambre era aguda en la ciudad, hasta no haber pan para la población. Biblia Serafín de Ausejo 1975 El día nueve del mes cuarto cuando el hambre arreciaba en la ciudad y la población del país no tenía que comer, Biblia Reina Valera Gómez (2023) En el mes cuarto, a los nueve del mes, prevaleció el hambre en la ciudad, hasta no haber pan para el pueblo de la tierra. |
Al cuarto mes, el día noveno del mes, la carestía era tan recia en la ciudad que no había pan para el pueblo.
Sí, el Señor Dios todopoderoso quitará a Jerusalén y a Judá todo apoyo y sostén, todo sostén de pan, todo sostén de agua:
Y si te dicen: ¿Adónde vamos a ir?, les responderás: Esto dice el Señor: ¡Quien está destinado a la peste, a la peste; quien a la espada, a la espada; quien al hambre, al hambre; quien al cautiverio, al cautiverio!
Le haré comer la carne de sus hijos y la de sus hijas, y se devorarán mutuamente en la extrema angustia del asedio y en medio de los apuros con que les estrujarán sus enemigos, los que buscan su muerte.
El que quede en esta ciudad morirá de espada, de hambre o de peste; el que salga y se rinda a los caldeos que os asedian, vivirá. Conservará su vida como botín.
Haré desaparecer de entre ellos los gritos de alegría y algazara, el canto del esposo y de la esposa, el ruido del molino y la luz de la lámpara.
Entonces el rey Sedecías dio orden de que Jeremías fuese llevado al patio de la guardia y que se le diera diariamente un pan procedente de la calle de los panaderos mientras hubiese pan en la ciudad. Así Jeremías quedó en el patio de la guardia.
'Oh rey, mi señor, mal han procedido todos esos hombres en todo lo que han hecho al profeta Jeremías. Lo han echado en la cisterna, donde va a morir de hambre, pues ya no hay pan en la ciudad'.
El año undécimo de Sedecías, el día nueve del cuarto mes, fue abierta una brecha en la ciudad.
Todo su pueblo suspira buscando pan; dan sus joyas a cambio de comida, por sustentar la vida. '¡Mira, Señor, y observa qué envilecida estoy!'.
'Hijo de hombre, si un país peca contra mí y comete un crimen, yo extenderé mi mano contra él, le quitaré los víveres, mandaré el hambre a aquella tierra y exterminaré en ella hombres y animales.
Esto dice el Señor Dios: 'Cuando yo mande contra Jerusalén estos cuatro azotes: espada, hambre, animales feroces y peste para exterminar de ella hombres y animales,
El año undécimo, el día uno del tercer mes, el Señor me dirigió la palabra y me dijo:
Cuando yo dispare contra vosotros las terribles flechas del hambre, que harán estragos porque las lanzaré justamente para destruiros, aumentaré el hambre entre vosotros y os quitaré las reservas de víveres.
Está fuera la espada; la peste y el hambre dentro; el que se encuentre en el campo caerá de hambre y peste.
Cuando yo retire el sustento de pan, diez mujeres bastarán para cocer el pan en un solo horno y os lo darán tasado, de manera que comeréis y no quedaréis satisfechos.
Esto dice el Señor todopoderoso: 'El ayuno del cuarto, quinto, séptimo y décimo mes se convertirá para la casa de Judá en júbilo y alegría y en alegres fiestas; pero amad la lealtad y la paz'.
Quedarán extenuados por el hambre, / consumidos por la fiebre y por la peste. / Enviaré contra ellos fieras salvajes y serpientes venenosas.