no lleguen a ser como sus padres, una generación indócil y rebelde, generación cuyo corazón no fue constante, y cuyo espíritu fue desleal para con Dios.
Jeremías 5:23 - Biblia Martin Nieto Pero este pueblo tiene un corazón indómito y rebelde; se han apartado y se han ido. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 No obstante, este pueblo tiene corazón falso y rebelde; se apartaron y se fueron. Biblia Nueva Traducción Viviente Sin embargo, mi pueblo tiene el corazón terco y rebelde; se alejó y me abandonó. Biblia Católica (Latinoamericana) Pero este pueblo, cuyo corazón es traidor y rebelde,
me ha vuelto la espalda y se ha marchado, La Biblia Textual 3a Edicion Pero este pueblo tiene un corazón obstinado y rebelde; Han apostatado y se han ido. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Pero este pueblo tiene un corazón terco y rebelde; dieron media vuelta y se fueron Biblia Reina Valera Gómez (2023) Pero este pueblo tiene un corazón falso y rebelde; se volvieron y se fueron. |
no lleguen a ser como sus padres, una generación indócil y rebelde, generación cuyo corazón no fue constante, y cuyo espíritu fue desleal para con Dios.
Durante cuarenta años aquella generación me asqueó, y dije: 'Son un pueblo de corazón rebelde, no han entendido mis caminos'.
¿Para qué golpearos todavía, si os seguís rebelando? Enferma está toda la cabeza, el corazón entero dolorido.
El corazón es complejo más que toda otra cosa y perverso: ¿quién lo conoce a fondo?
Como guardas de campo cercan a Jerusalén por haberse rebelado contra mí, dice el Señor.
Me dirigiré, pues, a los grandes y les hablaré, porque éstos conocen el camino del Señor y el precepto de su Dios. ¡Pero unos y otros han quebrado el yugo y han roto las coyundas!
Son todos empedernidos rebeldes, sembradores de calumnias, todos ellos corrompidos.
Mi pueblo se inclina a la apostasía; gritan a lo alto, pero nadie los levanta.
Se alimentan del pecado de mi pueblo, están hambrientos de su iniquidad.
Si uno tiene un hijo indócil y rebelde, que no obedece a sus padres ni a fuerza de castigos,
porque yo sé que eres un pueblo rebelde y de cabeza dura. Si hoy, cuando yo estoy todavía en medio de vosotros, sois rebeldes al Señor, cuánto más lo seréis después de mi muerte.
Hermanos, tened cuidado, que no haya entre vosotros un corazón tan malo e incrédulo que se aparte del Dios vivo.