El Señor mandó contra ellos al rey de los caldeos, que pasó a espada a sus jóvenes en el santuario mismo, sin perdonar a nadie, ni joven ni virgen, ni anciano ni hombre encanecido. Dios los entregó a todos en sus manos.
Jeremías 11:22 - Biblia Martin Nieto 'Yo los castigaré; sus jóvenes caerán a espada, sus hijos y sus hijas morirán de hambre, Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 así, pues, ha dicho Jehová de los ejércitos: He aquí que yo los castigaré; los jóvenes morirán a espada, sus hijos y sus hijas morirán de hambre, Biblia Nueva Traducción Viviente Así que esto dice el Señor de los Ejércitos Celestiales acerca de ellos: «¡Yo los castigaré! Sus jóvenes morirán en batalla y sus hijos e hijas morirán de hambre. Biblia Católica (Latinoamericana) Yavé dice: 'Por eso, les pediré cuentas. Sus jóvenes serán muertos a espada; sus hijos y sus hijas perecerán de hambre. La Biblia Textual 3a Edicion Por tanto, así dice YHVH Sebaot: He aquí que Yo visitaré esto sobre ellos: los muchachos morirán a espada, y sus hijos y sus hijas morirán de hambre, Biblia Serafín de Ausejo 1975 Por eso, así dice Yahveh Sebaot: 'Aquí estoy yo para castigarlos: los jóvenes morirán a espada, sus hijos y sus hijas morirán de hambre, y no quedará de ellos ni resto, pues traeré una desgracia sobre las gentes de Anatot el año de su castigo'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Así, pues, dice Jehová de los ejércitos: He aquí que yo los castigaré; los jóvenes morirán a espada; sus hijos y sus hijas morirán de hambre; |
El Señor mandó contra ellos al rey de los caldeos, que pasó a espada a sus jóvenes en el santuario mismo, sin perdonar a nadie, ni joven ni virgen, ni anciano ni hombre encanecido. Dios los entregó a todos en sus manos.
¡Entrega, pues, a sus hijos al hambre, abandónalos a merced de la espada! ¡Quédense sus mujeres sin hijos y sin marido! ¡Mueran de peste sus hombres, y sus jóvenes atravesados por la espada en la guerra!
Yo os castigaré como lo merecen vuestras obras -dice el Señor-; prenderé fuego a su bosque, y devorará todos sus alrededores'.
Castigaré a los que viven en Egipto, como castigué a Jerusalén, con la espada, el hambre y la peste.
Sí, en sus plazas caerán sus jóvenes, y todos sus guerreros perecerán aquel día -dice el Señor omnipotente-.
Los cadáveres de los hombres yacen como estiércol en los campos, como gavillas tras el segador, sin haber quién las recoja'.
Por tierra yacían en las calles niños y ancianos; mis doncellas y mis jóvenes cayeron a cuchillo; ¡has sembrado muerte en el día de tu ira, has degollado sin compasión!
Envié contra vosotros una peste como la de Egipto, maté a espada a vuestra juventud e hice subir el mal olor de vuestros campamentos hasta vuestras narices; ¡y no habéis vuelto a mí!, dice el Señor.