Se publicó después un bando en Judá y Jerusalén para que todos los repatriados se reunieran en Jerusalén,
Esdras 10:8 - Biblia Martin Nieto bajo la amenaza de confiscación de todos sus bienes y exclusión de la comunidad a todo aquel que no se presentara en el término de tres días, según la decisión de los jefes y los ancianos. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 y que el que no viniera dentro de tres días, conforme al acuerdo de los príncipes y de los ancianos, perdiese toda su hacienda, y el tal fuese excluido de la congregación de los del cautiverio. Biblia Nueva Traducción Viviente Si los jefes y los ancianos así lo decidían, los que no acudieran en el plazo de tres días perderían el derecho a todas sus propiedades y serían expulsados de la asamblea de los desterrados. Biblia Católica (Latinoamericana) Si alguien -decía el bando de los jefes y de los ancianos- no comparecía dentro de tres días, todos sus bienes serían condenados al anatema y hasta él mismo sería rechazado de la comunidad de los desterrados. La Biblia Textual 3a Edicion y a todo el que no llegara en tres días, conforme al acuerdo de los príncipes y de los ancianos, toda su hacienda fuera hecha anatema, y él mismo fuera proscrito de la congregación del cautiverio. Biblia Serafín de Ausejo 1975 A todo aquel que no se presentara en el término de tres días, conforme al acuerdo de los jefes y de los ancianos, se le confiscarían todos sus bienes y quedaría separado de la comunidad de los que habían vuelto del destierro. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y que el que no viniese en un lapso de tres días, conforme al acuerdo de los príncipes y de los ancianos, perdiese toda su hacienda, y él fuese apartado de la congregación de aquellos que habían sido llevados en cautiverio. |
Se publicó después un bando en Judá y Jerusalén para que todos los repatriados se reunieran en Jerusalén,
A los tres días, se reunieron en Jerusalén todos los hombres de Judá y Benjamín. Era el día veinte del mes noveno. Todo el pueblo se situó en la plaza del templo de Dios, temblando por la gravedad del caso y porque llovía copiosamente.
Y todo aquel que no cumpla la ley de tu Dios, que es también la ley del rey, será severamente castigado con la muerte, con el destierro, con confiscación de bienes o con la cárcel'.
Hasta a uno de los hijos de Yoyadá, hijo del sumo sacerdote Eliasib, yerno de Sambalat, el joronita, lo alejé de mi lado.
Así que cuando oyeron la ley, excluyeron de Israel a todos los extranjeros.
Ninguna cosa de su propiedad -hombres, animales o campos de propiedad hereditaria- que uno consagre al Señor podrá ser vendida o rescatada. Lo que se consagra al Señor es cosa santísima y pertenece al Señor.
Si no quiere escucharles, dilo a la comunidad; y si tampoco quiere escuchar a la comunidad, considéralo como pagano y publicano.
Os echarán de las sinagogas; más aún, se acerca la hora en que os quitarán la vida creyendo que con ello dan culto a Dios.
Sus padres hablaron así por miedo a los judíos, que habían decidido expulsar de la sinagoga al que reconociera que Jesús era el mesías.
Le respondieron: 'Todo tú eres pecado desde que naciste, y ¿nos enseñas a nosotros?'. Y lo expulsaron de la sinagoga. CONCLUSIÓN
A los de fuera, Dios los juzgará. Echad de entre vosotros al malvado.
Toda la plata y el oro, todos los objetos de bronce y de hierro serán consagrados al Señor y entrarán en su tesoro'.
Se preguntaron: '¿Quién de entre todas las tribus de Israel no acudió a la asamblea del Señor?'. Porque habían jurado solemnemente que quien no subiese a Mispá ante el Señor sería castigado con la muerte.
Tomó un par de bueyes, los hizo pedazos y los envió a todo el territorio de Israel por medio de los mensajeros, diciendo: 'Así serán tratados los bueyes de todo aquel que no siga a Saúl'. Entonces el temor del Señor cayó sobre todo el pueblo y salieron como un solo hombre.