Daniel 4:20 - Biblia Martin Nieto El rey ha visto también bajar del cielo un vigilante, un santo, que decía: Derribad el árbol y hacedlo trozos, pero dejad el tocón con sus raíces en la tierra y sea atado entre la hierba del campo con cadenas de bronce y hierro, bañado por el rocío del cielo y comparta la suerte con los animales salvajes hasta que hayan pasado por él siete períodos. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 El árbol que viste, que crecía y se hacía fuerte, y cuya copa llegaba hasta el cielo, y que se veía desde todos los confines de la tierra, Biblia Nueva Traducción Viviente El árbol que usted vio crecía alto y se hacía fuerte y se elevaba hacia los cielos para que todo el mundo lo viera. Biblia Católica (Latinoamericana) Pero viste, oh rey, que bajaba del cielo un ángel, un Santo, y decía: Corten el árbol, destrúyanlo, pero dejen en la tierra el tronco y las raíces atadas con cadenas de hierro y de bronce en medio de la hierba del campo, que sea mojado por el rocío del cielo y que comparta su alimento con los animales salvajes hasta que pasen siete años sobre él. La Biblia Textual 3a Edicion El árbol que has visto, que crecía y se hacía fuerte, y cuya copa llegaba a los cielos, y se extendía a todos los confines de la tierra, Biblia Serafín de Ausejo 1975 'En cuanto a lo que vio el rey: a un vigilante, a un santo, que bajaba del cielo y decía: abatid el árbol y destruidlo, pero dejad en la tierra el tocón y sus raíces, atado con cadenas de hierro y de bronce, entre la hierba de los campos; que se empape del rocío del cielo y que comparta su vida con las bestias del campo, hasta que pasen sobre él siete tiempos', Biblia Reina Valera Gómez (2023) El árbol que viste, que crecía y se hacía fuerte, y que su altura llegaba hasta el cielo, y que era visible a toda la tierra; |
Hice temblar a las naciones con el estrépito de su caída; cuando le hice bajar al reino de la muerte con los que bajan a la fosa, se consolaron en las moradas subterráneas todos los árboles de Edén, los bellos y magníficos árboles del Líbano, regados todos por las aguas.
A un cedro del Líbano de espléndido ramaje, espesa fronda y altura sublime; entre las nubes despuntaba su copa.
Éste es, oh rey, el significado de la visión, que es una sentencia del altísimo sobre mi señor el rey: