Entonces el rey dijo a la mujer: 'Te pido que no me ocultes nada de cuanto voy a preguntarte'. La mujer respondió: 'Hable mi señor, el rey'.
2 Samuel 14:17 - Biblia Martin Nieto Tu sierva se dijo: La palabra del rey, mi señor, servirá para tranquilizarnos; pues mi señor, el rey, es como un ángel de Dios para comprender el bien y el mal. Que el Señor, tu Dios, esté contigo'. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Tu sierva, pues, dice: Sea ahora de consuelo la respuesta de mi señor el rey, pues que mi señor el rey es como un ángel de Dios para discernir entre lo bueno y lo malo. Así Jehová tu Dios sea contigo. Biblia Nueva Traducción Viviente Sí, mi señor el rey nos devolverá la tranquilidad de espíritu”. Sé que usted es como un ángel de Dios que puede distinguir entre lo bueno y lo malo. Que el Señor su Dios esté con usted. Biblia Católica (Latinoamericana) Y me dije: 'Ojalá el señor rey pudiera decir tan sólo una palabra apaciguante, porque el rey es como un ángel de Dios, que comprende el bien y el mal. Que Yavé tu Dios esté contigo'. La Biblia Textual 3a Edicion También tu sierva se dijo: Que la palabra de mi señor el rey sea para mi consuelo, ya que como un ángel° de Dios, así es mi señor el rey para discernir entre el bien y el mal, pues YHVH tu Dios está contigo. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Y además se dijo tu sierva: 'Sírvame de alivio la palabra del rey, mi señor; pues es como el ángel de Yahveh para oír lo bueno y lo malo'. ¡Que Yahveh, tu Dios, sea contigo!'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Tu sierva, pues, dice: Que la palabra de mi señor el rey sea para consuelo; pues que mi señor el rey es como un ángel de Dios para escuchar lo bueno y lo malo. Así Jehová tu Dios sea contigo. |
Entonces el rey dijo a la mujer: 'Te pido que no me ocultes nada de cuanto voy a preguntarte'. La mujer respondió: 'Hable mi señor, el rey'.
Tu siervo Joab ha obrado de este modo para dar otro aspecto al asunto. Pero mi señor es sabio con la sabiduría del ángel de Dios, y sabe cuanto pasa en la tierra'.
Él respondió: 'Mi señor, el rey; mi servidor me engañó, pues tu siervo le dijo: Aparéjame el asno para montar en él e ir con el rey; porque tu siervo es cojo.
Él calumnió a tu siervo ante mi señor, el rey. Pero mi señor, el rey, es como el ángel de Dios; haz lo que quieras.
Todo Israel se enteró de la sentencia que el rey había pronunciado y todos temieron al rey, viendo que había en él una sabiduría divina para administrar justicia.
Concédeme un corazón prudente para gobernar a tu pueblo y saber discernir entre lo bueno y lo malo. Porque ¿quién, si no, podrá gobernar a este tu pueblo tan grande?'.
¿Hay acaso en mi lengua falsedad? Mi paladar, ¿ya no distingue lo que es malo?
El crisol prueba la plata y el fuego el oro, y al hombre la voz del que lo alaba.
El alimento sólido es para los perfectos, que por razón de la costumbre tienen el sentido moral desarrollado para distinguir entre el bien y el mal.
Lo mismo que obedecimos en todo a Moisés, así te obedeceremos a ti. Únicamente, que el Señor, tu Dios, esté contigo como estuvo con Moisés.
Aquís le respondió: 'Bien sabes que eres grato a mis ojos como un ángel de Dios; pero los jefes de los filisteos han dicho: Que no vaya con nosotros a la guerra.