Si he venido a hablar al rey de este asunto, ha sido porque el pueblo me ha atemorizado; y entonces tu sierva se dijo: yo hablaré al rey, pues tal vez haga lo que su sierva le indique;
2 Samuel 14:16 - Biblia Martin Nieto pues el rey accederá a librar a su sierva de la mano del hombre que intenta extirparme, juntamente con mi hijo, de la herencia de Dios. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Pues el rey oirá, para librar a su sierva de mano del hombre que me quiere destruir a mí y a mi hijo juntamente, de la heredad de Dios. Biblia Nueva Traducción Viviente y nos rescate de los que quieren quitarnos la herencia que Dios nos dio. Biblia Católica (Latinoamericana) A lo mejor el rey me atiende y quiere librarme del que quiere cercenarnos a mí y a mi hijo de la herencia de Dios. La Biblia Textual 3a Edicion Por cuanto el rey ha de oír, para librar a su sierva de la palma° del hombre que querría destruirme, a mí y a mi hijo, eliminándolos de la heredad de Dios. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Porque el rey ha de prestar atención para librar a su sierva de manos del que quiere exterminarnos a la vez a mí y a mi hijo de la heredad de Dios. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Pues el rey oirá, para librar a su sierva de la mano del hombre que me quiere destruir a mí, y a mi hijo juntamente, de la heredad de Dios. |
Si he venido a hablar al rey de este asunto, ha sido porque el pueblo me ha atemorizado; y entonces tu sierva se dijo: yo hablaré al rey, pues tal vez haga lo que su sierva le indique;
Nuestra ciudad es de las ciudades pacíficas, fieles e importantes de Israel, y tú intentas destruirla. ¿Por qué quieres destruir la heredad del Señor?'.
él liberará al pobre que suplica, al miserable que no tiene apoyo alguno;
Los oráculos están en los labios del rey, y en el juicio su boca no yerra.
La porción del Señor fue su pueblo; / Jacob, la parte de su herencia.
Y ahora, que el rey, mi señor, se digne escuchar las palabras de su siervo: Si es el Señor quien te excita contra mí, que sea aplacado con una ofrenda; pero si son los hombres, malditos sean del Señor, pues me echan hoy para que no participe en la herencia del Señor, diciendo: Vete a servir a dioses extraños.