Elías, al oírlo, se cubrió el rostro con su capa, salió fuera y se quedó de pie a la entrada de la cueva. Y una voz le preguntó: '¿Qué haces aquí, Elías?'.
2 Reyes 2:8 - Biblia Martin Nieto Entonces Elías tomó su manto, lo enrolló y golpeó con él las aguas, las cuales se dividieron a uno y otro lado, de modo que pasaron ambos a pie enjuto. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Tomando entonces Elías su manto, lo dobló, y golpeó las aguas, las cuales se apartaron a uno y a otro lado, y pasaron ambos por lo seco. Biblia Nueva Traducción Viviente Luego Elías dobló su manto y con él golpeó el agua. ¡El río se dividió en dos y ambos cruzaron sobre tierra seca! Biblia Católica (Latinoamericana) Entonces Elías tomó su manto, lo enrolló y golpeó con él el agua y ésta se dividió, de modo que ambos atravesaron en seco. La Biblia Textual 3a Edicion Entonces Elías tomó su manto, lo dobló y golpeó las aguas, y se separaron a uno y otro lado; y ambos cruzaron por tierra seca. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Elías tomó su manto, lo plegó y golpeó con él las aguas, que se dividieron a un lado y a otro, y pasaron los dos a pie enjuto. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Tomando entonces Elías su manto, lo dobló, y golpeó las aguas, las cuales se apartaron a uno y a otro lado, y pasaron ambos en seco. |
Elías, al oírlo, se cubrió el rostro con su capa, salió fuera y se quedó de pie a la entrada de la cueva. Y una voz le preguntó: '¿Qué haces aquí, Elías?'.
Elías se fue de allí en busca de Eliseo, al que encontró arando. Tenía delante de sí doce yuntas de bueyes, y él araba con la duodécima. Elías pasó junto a él y le echó encima su capa.
Entonces tomó el manto, que se le había caído a Elías de encima, y golpeó con él las aguas, diciendo: '¿Dónde está el Señor, Dios de Elías? ¿Dónde está?'. Golpeó las aguas, y éstas se dividieron a uno y otro lado, y pasó a pie enjuto.
Pero los israelitas pasaron sin mojarse por medio del mar, formando para ellos las aguas como una muralla a ambos lados.
El Señor secará el golfo del mar de Egipto; levantará su mano contra el Éufrates con su potente soplo, y lo dividirá en siete arroyos que se podrán pasar sandalia en pie;
Por la fe pasaron el mar Rojo como por tierra seca; e intentando hacer lo mismo los egipcios, fueron sumergidos en las olas.
fueron apedreados, torturados, aserrados, pasados a filo de espada, anduvieron errantes, cubiertos con pieles de ovejas y de cabras, desprovistos de todo, oprimidos, maltratados,
El sexto vertió su copa sobre el río grande, el Éufrates, y sus aguas se secaron, dejando paso libre a los reyes del oriente.
Saúl le preguntó: '¿Qué aspecto tiene?'. Ella respondió: 'Es un anciano que sube envuelto en un manto'. Saúl comprendió que era Samuel, inclinándose rostro en tierra se prosternó.