Al salir de la sinagoga, los fariseos planearon el modo de acabar con El.
Juan 7:32 - Nueva Biblia Española (1975) Oyeron los fariseos estos cuchicheos de la gente y, entonces, los sumos sacerdotes y los fariseos mandaron guardias a prenderlo. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Los fariseos oyeron a la gente que murmuraba de él estas cosas; y los principales sacerdotes y los fariseos enviaron alguaciles para que le prendiesen. Biblia Nueva Traducción Viviente Cuando los fariseos se enteraron de lo que las multitudes andaban murmurando, ellos y los principales sacerdotes enviaron guardias del templo para arrestar a Jesús. Biblia Católica (Latinoamericana) Los fariseos se enteraron de los comentarios que hacía la gente sobre Jesús y, de acuerdo con los jefes de los sacerdotes, enviaron guardias del Templo para detenerlo. La Biblia Textual 3a Edicion Oyeron los fariseos a la gente comentando estas cosas de Él, y los principales sacerdotes y los fariseos enviaron alguaciles para que lo prendieran. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Al enterarse los fariseos de que el pueblo rumoreaba esto acerca de él, los pontífices y los fariseos enviaron guardias para prenderlo. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Los fariseos oyeron al pueblo que murmuraba de Él estas cosas; y los príncipes de los sacerdotes y los fariseos enviaron alguaciles para que le prendiesen. |
Al salir de la sinagoga, los fariseos planearon el modo de acabar con El.
¡Ay de ustedes, letrados y fariseos hipócritas, que les cierran a los hombres el reino de Dios!
Pedro lo fue siguiendo de lejos hasta el palacio del sumo sacerdote, entró dentro y se sentó con los guardias para ver en qué paraba aquello.
Algunos de ellos, sin embargo, fueron a ver a los fariseos y les refirieron lo que había hecho Jesús.
A esto, los fariseos se dijeron entre ellos: Están viendo que no adelantan nada; miren, todo el mundo ha ido detrás de él.
Así, el tal Judas, cogiendo el batallón y, además, guardias de los sumos sacerdotes y de los fariseos, fue allí con faroles, antorchas y armas.
Intentaron entonces prenderlo, pero nadie le puso la mano encima, porque todavía no había llegado su hora.
Salió el comisario con los guardias y se los trajo, sin emplear la fuerza, por miedo a que el pueblo los apedreara.
despachó emisarios para apresarlo. Encontraron a la comunidad de profetas en trance, presididos por Samuel; el espíritu de Dios se apoderó de los emisarios de Saúl, y también ellos entraron en trance.