Jeremías 32:2 - Biblia Version Moderna (1929)

² Es de saber que a la sazón el ejército del rey de Babilonia tenía sitiada a Jerusalem, y el profeta Jeremías estaba encerrado en el patio de la cárcel que había en la casa del rey de Judá.

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Biblia Reina Valera 1960

² Entonces el ejército del rey de Babilonia tenía sitiada a Jerusalén, y el profeta Jeremías estaba preso en el patio de la cárcel que estaba en la casa del rey de Judá.

Biblia Nueva Traducción Viviente

² Para entonces, Jerusalén estaba sitiada por el ejército babilónico y Jeremías estaba preso en el patio de la guardia del palacio real.

Biblia Católica (Latinoamericana)

² En ese entonces, el ejército del rey de Babilonia sitiaba a Jerusalén y el profeta Jeremías se hallaba detenido en el patio de la guardia del palacio real de Judá,

La Biblia Textual 3a Edicion

² En aquel tiempo el ejército del rey de Babilonia tenía sitiada a Jerusalem, y el profeta Jeremías estaba preso en el atrio de la guardia de la casa del rey de Judá.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

² El ejército del rey de Babilonia sitiaba por aquel entonces a Jerusalén, y el profeta Jeremías se hallaba recluido en el patio de la guardia que había en el palacio real de Judá,

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

² En aquel entonces el ejército del rey de Babilonia tenía cercada a Jerusalén; y el profeta Jeremías estaba preso en el patio de la cárcel que estaba en la casa del rey de Judá.

Jeremías 32:2 Σταυροειδείς Αναφορές

2 Reyes 25:1

ACONTECIÓ pues que en el año noveno de su reinado, en el mes décimo, a los diez del mes, vino el rey de Babilonia, él y todo su ejército, contra Jerusalem, y asentó campamento contra ella; y edificaron torres contra ella al rededor:

Nehemías 3:25

Palal hijo de Uzai restauró desde en frente del ángulo entrante, y de la torre que sale hacia afuera de la Casa Alta del Rey, la cual torre está junto al patio de la cárcel. Después de él, Pedaya hijo de Paros.

Salmos 88:8

Has alejado de mí mis conocidos; me has hecho una abominación para ellos; estoy encerrado, y no puedo salir.

Jeremías 32:3

Porque le había encerrado Sedequías rey de Judá, diciendo: ¿Porqué profetizas tú y dices: Así dice Jehová: He aquí que voy a entregar esta ciudad en mano del rey de Babilonia, y él se apoderará de ella;

Jeremías 32:8

En efecto, vino a mí Hanamel, hijo de mi tío, conforme al oráculo de Jehová, al patio de la cárcel, y me dijo: Ruégote compres mi campo que está en Anatot, que está en la tierra de Benjamín; porque tuyo es el derecho de posesión, y tuyo el derecho de redención: cómpratelo. Entonces conocí que era aquello oráculo de Jehová.

Jeremías 33:1

Y ESTANDO Jeremías todavía preso en el patio de la cárcel, tuvo segunda vez revelación de Jehová, que decía:

Jeremías 34:1

EL oráculo que tuvo Jeremías de parte de Jehová, cuando Nabucodonosor rey de Babilonia, y todo su ejército y todos los reinos de la tierra que había bajo su dominio, y todos los pueblos, peleaban contra Jerusalem y contra todas sus ciudades, el cual decía:

Jeremías 36:5

Luego mandó Jeremías a Baruc, diciendo: Yo estoy encerrado; no puedo entrar en la Casa de Jehová;

Jeremías 37:15

Y los príncipes estallaron en ira contra Jeremías, y le azotaron, y le pusieron en la cárcel, en la casa de Jonatán secretario; porque a ésta la habían convertido en cárcel.

Jeremías 37:21

Entonces mandó el rey Sedequías, y pusieron preso a Jeremías en el patio de la cárcel, y le dieron diariamente un bollo de pan, de la calle de los panaderos, hasta que se consumió todo el pan en la ciudad. Y así se quedó Jeremías en el patio de la cárcel.

Jeremías 37:4

Es de saber que Jeremías entraba y salía en medio del pueblo, pues no le habían aún puesto en la cárcel;

Jeremías 38:13

Y sacaron a Jeremías con las sogas, alzándole de la cisterna; y permaneció Jeremías en el patio de la cárcel.

Jeremías 38:6

Ellos pues tomaron a Jeremías y le echaron en la cisterna de Malquías, hijo de Hamelec, que había en el patio de la cárcel; y bajaron a Jeremías por medio de sogas: y en la cisterna no había agua, sino fango; y hundióse Jeremías en el fango.

Mateo 5:12

¡Regocijaos y llenaos de júbilo;  porque grande es vuestro galardón en los cielos!  pues así persiguieron a los profetas que fueron antes de vosotros.