Daniel 6:8 - Biblia Version Moderna (1929)8 Ahora pues, oh rey, establece el entredicho y firma la escritura, para que no se pueda mudar, conforme a la ley de los Medos y Persas, que no puede abrogarse. Δείτε το κεφάλαιοΠερισσότερες εκδόσειςBiblia Reina Valera 19608 Ahora, oh rey, confirma el edicto y fírmalo, para que no pueda ser revocado, conforme a la ley de Media y de Persia, la cual no puede ser abrogada. Δείτε το κεφάλαιοBiblia Nueva Traducción Viviente8 Ahora bien, su majestad, emita y firme esta ley de tal modo que no pueda ser alterada, una ley oficial de los medos y de los persas que no puede ser revocada». Δείτε το κεφάλαιοBiblia Católica (Latinoamericana)8 Ahora, oh rey, toma esa decisión, haz que se ponga por escrito para que no sea modificada y así, según la ley de los Medos y de los Persas, nadie pueda anularla'. Δείτε το κεφάλαιοLa Biblia Textual 3a Edicion8 Ahora, oh rey, confirma el edicto y fírmalo para que no sea modificado, conforme a la ley de Media y de Persia, que es irrevocable. Δείτε το κεφάλαιοBiblia Serafín de Ausejo 19758 Todos los inspectores del reino, los prefectos, los sátrapas, los consejeros y los gobernadores aconsejan que se promulgue un edicto real, por el cual se ponga en vigor esta prohibición: 'Quien, por espacio de treinta días, haga una oración a quienquiera que sea, Dios u hombre, fuera de a ti, ¡oh rey!, sea arrojado al foso de los leones'. Δείτε το κεφάλαιοBiblia Reina Valera Gómez (2023)8 Ahora, oh rey, confirma el edicto, y firma la escritura, para que no pueda ser cambiada, conforme a la ley de Media y de Persia, la cual no puede ser revocada. Δείτε το κεφάλαιο |
Fueron llamados pues los secretarios del rey en el mes primero, al día trece del mismo; y conforme a todo lo que mandó Hamán se escribió a los sátrapas del rey, y a los gobernadores que había en cada provincia, y a los príncipes de cada pueblo; a cada provincia conforme a su escritura, y a cada pueblo según su lenguaje; en el nombre del rey Asuero fué escrito, y fué sellado con el anillo del rey.
Luego se llegaron y hablaron delante del rey acerca del entredicho real, diciendo: ¿No firmaste tú un entredicho al efecto que todo hombre que hiciere petición a cualquier dios u hombre, por espacio de treinta días, como no sea a ti, oh rey, fuese echado en el foso de los leones? Respondió el rey y dijo: Verdad es, conforme a la ley de los Medos y Persas, que no se puede abrogar.