Daniel 4:14 - Biblia Version Moderna (1929)14 y clamó a grandes voces, y dijo así: ¡Cortad el árbol, y desmochad sus ramas, sacudid su follaje, y derramad su fruto; váyanse las bestias de debajo de él, y las aves de sus ramas! Δείτε το κεφάλαιοΠερισσότερες εκδόσειςBiblia Reina Valera 196014 Y clamaba fuertemente y decía así: Derribad el árbol, y cortad sus ramas, quitadle el follaje, y dispersad su fruto; váyanse las bestias que están debajo de él, y las aves de sus ramas. Δείτε το κεφάλαιοBiblia Nueva Traducción Viviente14 El mensajero gritó: ‘¡Talen el árbol y córtenle las ramas! ¡Sacúdanle las hojas y desparramen su fruta! Espanten los animales salvajes que están bajo su sombra y las aves que están en sus ramas. Δείτε το κεφάλαιοBiblia Católica (Latinoamericana)14 Tal es el juicio pronunciado por los ángeles, tal es la decisión de los Santos; así sabrá todo ser viviente que el Altísimo es el dueño de las realezas humanas. El exalta si quiere al más humilde de los hombres. Δείτε το κεφάλαιοLa Biblia Textual 3a Edicion14 y clamando a gran voz, dijo así: ¡Cortad el árbol y quitadle sus ramas, sacudid su follaje y derramad su fruto, y váyanse las bestias que están debajo de él, y las aves de sus ramas! Δείτε το κεφάλαιοBiblia Serafín de Ausejo 197514 Por decreto de los vigilantes es esta sentencia, por orden de los santos es esta decisión, para que sepan todos los vivientes que el Altísimo domina sobre el reino de los hombres; lo da a quien le place y eleva al más humilde de los hombres.' Δείτε το κεφάλαιοBiblia Reina Valera Gómez (2023)14 Y clamaba fuertemente y decía así: Derribad el árbol, y cortad sus ramas, quitadle su follaje y desparramad su fruto; váyanse las bestias que están debajo de él, y las aves de sus ramas. Δείτε το κεφάλαιο |
Mas como vió el rey que un Velador y Santo descendió del cielo, y dijo: Cortad el árbol, y destruídlo; pero dejaréis el tronco de sus raíces en la tierra, con un cerco de bronce y de hierro, entre la hierba del campo, y con el rocío del cielo sea mojado, y entre la, bestias del campo sea suporción, hasta que pasen siete tiempos sobre él,
de entre los hombres fué expulsado, y su corazón se hizo semejante al de las bestias, y con los asnos monteses fué su morada; como a los bueyes le hicieron comer hierba, y con el rocío del cielo fué mojado su cuerpo, hasta tanto que conoció que el Altísimo Dios es el gobernador en el reino de los hombres, y que eleva sobre éa quien le parece.