Biblia Todo Logo
Διαδικτυακή Βίβλος
- Διαφημίσεις -





Apocalipsis 21:12 - Biblia Version Moderna (1929)

12 Tenía un muro grande y alto, y tenía doce puertas, y en las puertas doce ángeles; y había nombres escritos en ellas, que son los nombres de las doce tribus de Israel.

Δείτε το κεφάλαιο αντίγραφο


Περισσότερες εκδόσεις

Biblia Reina Valera 1960

12 Tenía un muro grande y alto con doce puertas; y en las puertas, doce ángeles, y nombres inscritos, que son los de las doce tribus de los hijos de Israel;

Δείτε το κεφάλαιο αντίγραφο

Biblia Nueva Traducción Viviente

12 La muralla de la ciudad era alta y ancha, y tenía doce puertas vigiladas por doce ángeles. Los nombres de las doce tribus de Israel estaban escritos en las puertas.

Δείτε το κεφάλαιο αντίγραφο

Biblia Católica (Latinoamericana)

12 Tenía una muralla grande y alta con doce puertas, y sobre las puertas doce ángeles y nombres grabados, que son los nombres de las doce tribus de los hijos de Israel.

Δείτε το κεφάλαιο αντίγραφο

La Biblia Textual 3a Edicion

12 Tiene un muro grande y alto, el cual tiene doce puertas, y sobre las puertas, doce ángeles, y unos nombres inscritos,° que son de las doce tribus de los hijos de Israel.

Δείτε το κεφάλαιο αντίγραφο

Biblia Serafín de Ausejo 1975

12 Tenía una muralla grande y elevada, en la que había doce puertas. Sobre las puertas había doce ángeles y nombres escritos encima, que son los de las doce tribus de los hijos de Israel.

Δείτε το κεφάλαιο αντίγραφο

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

12 Y tenía un muro grande y alto, y tenía doce puertas; y a las puertas, doce ángeles, y nombres escritos en ellas, que son los nombres de las doce tribus de los hijos de Israel.

Δείτε το κεφάλαιο αντίγραφο




Apocalipsis 21:12
21 Σταυροειδείς Αναφορές  

Asimismo doce leones estaban de pie allí sobre las seis gradas, de ésta y de aquélla parte. Nunca fué hecho otro semejante en ningún reino.


porque siervos somos. Sin embargo, en nuestra servidumbre no nos ha desamparado nuestro Dios, sino que nos ha extendido su misericordia delante de los reyes de Persia, para volver a darnos vida, para hacer levantar la Casa de nuestro Dios, y restaurar sus ruinas, y para darnos un vallado en Judá y Jerusalem.


¶Y en la dedicación del muro de Jerusalem, buscaron a los levitas por entre todos los lugares de ellos, a fin de hacerlos venir a Jerusalem, para celebrar la dedicación y el regocijo con acciones de gracias y con cánticos, con címbalos, con salterios y con arpas.


¡Sea la paz dentro de tus muros, el sosiego dentro de tus palacios!


¡Haz bien en tu buena voluntad a Sión! ¡edifica los muros de Jerusalem!


Y las piedras estarán arregladas conforme a los nombres de los hijos de Israel; doce, según los nombres de ellos; con grabaduras como de sello, cada una con su nombre; serán correspondientes a las doce tribus.


Y haré que sean tus almenas rubíes, y tus puertas carbunclos; y todo tu recinto, piedras de deleite.


No se oirá más la violencia en tu tierra, la desolación ni la destrucción dentro de tus términos; sino que llamarás a tus muros Salvación, y a tus puertas Alabanza.


¶Mirad que no tengáis en poco a uno de estos pequeñitos; porque yo os digo, que sus ángeles en los cielos ven de continuo el rostro de mi Padre que está en los cielos.


De esta manera, yo os lo digo, hay gozo en presencia de los ángeles de Dios, por un solo pecador que se arrepiente.


Mas aconteció que murió el mendigo, y fué llevado por los ángeles al seno de Abraham: el rico también murió, y fué sepultado.


a la cual nuestras doce tribus, sirviendo fervorosamente a Dios, día Y noche, esperan algún día llegar: y en cuanto a esta esperanza, oh rey, soy acusado por los judíos.


¿no son todos ellos espíritus ministradores, enviados para hacer servicio a favor de los que han de heredar la salvación?


De la parte del oriente había tres puertas; de la parte del norte, tres puertas; de la parte del sur, tres puertas; y de la parte del occidente, tres puertas.


Y el que hablaba conmigo tenía una vara de oro, para medir la ciudad, y sus puertas, y su muro.


Y sus puertas no se cerrarán jamás de día (pues no habrá allí noche);


Bienaventurados aquellos que lavan sus ropas, para que tengan derecho de llegar al árbol de la vida, y que puedan entrar por las puertas en la ciudad.


Ακολουθησε μας:

Διαφημίσεις


Διαφημίσεις