Biblia Todo Logo
Διαδικτυακή Βίβλος
- Διαφημίσεις -





2 Reyes 4:30 - Biblia Version Moderna (1929)

30 Empero la madre del niño le dijo: ¡Vive Jehová, y vive tu alma, que no me apartaré de ti! Levantóse pues, y la siguió.

Δείτε το κεφάλαιο αντίγραφο


Περισσότερες εκδόσεις

Biblia Reina Valera 1960

30 Y dijo la madre del niño: Vive Jehová, y vive tu alma, que no te dejaré.

Δείτε το κεφάλαιο αντίγραφο

Biblia Nueva Traducción Viviente

30 Pero la madre del niño dijo: «Tan cierto como que el Señor vive y que usted vive, yo no regresaré a mi casa a menos que usted venga conmigo». Así que Eliseo volvió con ella.

Δείτε το κεφάλαιο αντίγραφο

Biblia Católica (Latinoamericana)

30 Pero la madre del niño le dijo: 'Por la vida de Yavé y por tu propia vida, que no te dejaré'. Entonces él se levantó y la siguió.

Δείτε το κεφάλαιο αντίγραφο

La Biblia Textual 3a Edicion

30 Y dijo la madre del niño: ¡Vive YHVH y vive tu alma que no te dejaré! Y él se levantó y la siguió.

Δείτε το κεφάλαιο αντίγραφο

Biblia Serafín de Ausejo 1975

30 Pero la madre del niño dijo: '¡Por vida de Yahveh y por tu vida, que no te dejaré!'. Levantóse entonces Eliseo y se fue tras ella.

Δείτε το κεφάλαιο αντίγραφο

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

30 Y dijo la madre del niño: Vive Jehová, y vive tu alma, que no te dejaré. Él entonces se levantó y la siguió.

Δείτε το κεφάλαιο αντίγραφο




2 Reyes 4:30
8 Σταυροειδείς Αναφορές  

Y el otro le preguntó: ¿Cuál es tu nombre? Y él respondió: Jacob.


Entonces dijo Elías a Eliseo: Ruégote te quedes aquí; porque Jehová me ha enviado a Bet-el. Mas Eliseo le respondió: ¡Por vida de Jehová, y por vida tuya, que no te dejaré! Bajaron pues a Bet-el.


Le dijo de nuevo Elías: Eliseo,  ruégote te quedes aquí, porque Jehová me ha enviado a Jericó. Mas él dijo: ¡Por vida de Jehová, y por vida tuya, que no te dejaré! De modo que fueron a Jericó.


Elías le dijo otra vez: Ruégote te quedes aquí; porque Jehová me ha enviado al Jordán. Pero él le respondió: ¡Por vida de Jehová, y por vida tuya, que no te dejaré! Siguieron andando pues los dos.


Mas uno de ellos le dijo: Ruégote  consientas y vengas con tus siervos. A lo que dijo: Yo iré.


Y ella dijo: ¡Óyeme, señor mío! ¡Vive tu alma, señor mío, yo soy aquella mujer que estuvo junto a ti en este lugar, suplicando a Jehová.


Ακολουθησε μας:

Διαφημίσεις


Διαφημίσεις