Levítico 17:5 - Biblia Traducción en Lenguaje Actual5 »Los israelitas que me presenten esos animales como ofrenda para pedirme salud y bienestar deberán traerlos a la entrada del santuario. Allí se los entregarán al sacerdote, y él me los presentará. Δείτε το κεφάλαιοΠερισσότερες εκδόσειςBiblia Reina Valera 19605 a fin de que traigan los hijos de Israel sus sacrificios, los que sacrifican en medio del campo, para que los traigan a Jehová a la puerta del tabernáculo de reunión al sacerdote, y sacrifiquen ellos sacrificios de paz a Jehová. Δείτε το κεφάλαιοBiblia Nueva Traducción Viviente5 El propósito de esta regla es evitar que los israelitas sacrifiquen animales en campo abierto; asegurará que lleven sus sacrificios al sacerdote a la entrada del tabernáculo, para que él pueda presentar los animales al Señor como ofrendas de paz. Δείτε το κεφάλαιοBiblia Católica (Latinoamericana)5 Los hijos de Israel no sacrificarán más sus víctimas en el campo, sino que las traerán al sacerdote, a la entrada de la Tienda de las Citas. Allí las ofrecerán a Yavé como sacrificios de comunión. Δείτε το κεφάλαιοLa Biblia Textual 3a Edicion5 Los hijos de Israel, pues, llevarán las víctimas que sacrificaban en el campo y las harán acercar a la entrada de la Tienda de Reunión, ante YHVH, al sacerdote, y allí las sacrificarán como sacrificios de las ofrendas de paz a YHVH. Δείτε το κεφάλαιοBiblia Serafín de Ausejo 19755 Así, pues, los israelitas llevarán ante Yahveh, a la entrada de la tienda del encuentro, al sacerdote, los sacrificios que suelen inmolar en el campo, y los ofrecerán a Yahveh en sacrificio de comunión. Δείτε το κεφάλαιοBiblia Reina Valera Gómez (2023)5 a fin de que traigan los hijos de Israel sus sacrificios, los que sacrifican sobre la faz del campo, para que los traigan a Jehová a la puerta del tabernáculo de la congregación, al sacerdote, y los ofrezcan como ofrendas de paz a Jehová. Δείτε το κεφάλαιο |
»Destruyan todos los lugares donde adoran a sus dioses los pueblos que ustedes conquisten. Se encuentran por todos lados, y deben ser destruidos. Están en las montañas, en las colinas y bajo los árboles. Hagan pedazos las piedras y las esculturas de sus dioses, y quemen los maderos que ellos adoran. ¡Que no quede de ellos ni el recuerdo!