Y mientras ellas iban a comprar, vino el esposo; y las que estaban preparadas entraron con él a las bodas; y fué cerrada la puerta.
Lucas 14:15 - Biblia Version Moderna (1929) ¶Oyendo esto uno de los que estaban sentados a la mesa con él, le dijo: ¡Bienaventurado aquel que comerá pan en el reino de Dios! Περισσότερες εκδόσειςBiblia Reina Valera 1960 Oyendo esto uno de los que estaban sentados con él a la mesa, le dijo: Bienaventurado el que coma pan en el reino de Dios. Biblia Nueva Traducción Viviente Al oír esto, un hombre que estaba sentado a la mesa con Jesús exclamó: «¡Qué bendición será participar de un banquete en el reino de Dios!». Biblia Católica (Latinoamericana) Al oír estas palabras, uno de los invitados le dijo: 'Feliz el que tome parte en el banquete del Reino de Dios. La Biblia Textual 3a Edicion Oyendo estas cosas, uno de los que estaban juntamente reclinados a la mesa, le dijo: Bienaventurado todo el que coma° pan en el reino de Dios. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Cuando oyó esto uno de los comensales, le dijo: 'Dichoso el que participe en el banquete del reino de Dios'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y oyendo esto uno de los que estaban sentados con Él a la mesa, le dijo: Bienaventurado el que coma pan en el reino de Dios. |
Y mientras ellas iban a comprar, vino el esposo; y las que estaban preparadas entraron con él a las bodas; y fué cerrada la puerta.
Y yo os digo que muchos vendrán del Oriente, y del Occidente, y se sentarán a la mesa con Abraham e Isaac y Jacob, en el reino de los cielos:
¡Bienaventurados aquellos siervos, a quienes su señor, cuando viniere, los hallare velando! en verdad os digo, que él mismo se ceñirá, y haciendo que ellos se sienten a la mesa, se llegará y les servirá.
Y vendrán del Oriente y del Occidente, y del Norte y del Mediodía, y se sentarán a la mesa en el reino de Dios.
porque os digo, que no comeré más de ella, hasta que sea cumplida en el reino de Dios.
para que comáis y bebáis a mi mesa, en mi reino, y os sentéis sobre tronos, juzgando las doce tribus de Israel.
Y él me dijo: Escribe: iBienaventurados aquellos que han sido llamados a la cena de las bodas del Cordero! Y díjome: Éstas son verdaderas palabras de Dios.