Una misma ley habrá para los de vuestra raza y para el extranjero que habita en medio de vosotros.
Levítico 17:12 - Biblia Version Moderna (1929) Por lo mismo he dicho a los hijos de Israel: Ninguna persona de entre vosotros ha de comer sangre; ni tampoco el extranjero que mora en medio de vosotros ha de comer sangre. Περισσότερες εκδόσειςBiblia Reina Valera 1960 Por tanto, he dicho a los hijos de Israel: Ninguna persona de vosotros comerá sangre, ni el extranjero que mora entre vosotros comerá sangre. Biblia Nueva Traducción Viviente Por esta razón le he dicho al pueblo de Israel: “Nunca coman ni beban sangre, ni ustedes ni los extranjeros que vivan entre ustedes”. Biblia Católica (Latinoamericana) Por eso he dicho a los hijos de Israel: 'Ninguno de ustedes comerá sangre, ni tampoco el forastero que viva entre ustedes. La Biblia Textual 3a Edicion Por tanto, he dicho a los hijos de Israel: Ninguna persona entre vosotros comerá sangre, tampoco ningún extranjero que peregrina entre vosotros comerá sangre. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Por eso he dicho a los israelitas: 'Nadie de entre vosotros comerá sangre, ni la comerá tampoco el extranjero que habita en medio de vosotros'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Por tanto, he dicho a los hijos de Israel: Ninguna alma de vosotros comerá sangre, ni el extranjero que peregrina entre vosotros comerá sangre. |
Una misma ley habrá para los de vuestra raza y para el extranjero que habita en medio de vosotros.
Por tanto les dirás: Así dice Jehová el Señor: Con la sangre coméis, y alzáis los ojos a vuestros ídolos, y derramáis la sangre, ¿y acaso vosotros habéis de poseer la tierra?
porque la vida de la carne en la sangre está, la cual os he dado para hacer expiación en el altar por vuestras almas; porque la sangre, en virtud de ser la vida, es la que hace expiación.
¶Asimismo cualquier hombre de la casa de Israel, o de los extranjeros que moran en medio de ellos, que cogiere caza de animal o de ave que es lícito comer, derramará su sangre y la cubrirá con tierra.
Estatuto perpetuo será durante vuestras generaciones, en todas vuestras moradas, que no habéis de comer ni sebo ni sangre.