DIOS es nuestro refugio y fortaleza; socorro muy bien experimentado en las angustias.
Juan 4:47 - Biblia Version Moderna (1929) Cuando éste oyó decir que Jesús había venido de Judea a Galilea, fué a él, y le rogó que bajara a Capernaum, y sanara a su hijo; porque se estaba muriendo. Περισσότερες εκδόσειςBiblia Reina Valera 1960 Este, cuando oyó que Jesús había llegado de Judea a Galilea, vino a él y le rogó que descendiese y sanase a su hijo, que estaba a punto de morir. Biblia Nueva Traducción Viviente Cuando supo que Jesús había ido de Judea a Galilea, fue a verlo y le rogó que se dirigiera a Capernaúm para sanar a su hijo, quien estaba al borde de la muerte. Biblia Católica (Latinoamericana) Al saber que Jesús había vuelto de Judea a Galilea, salió a su encuentro para pedirle que fuera a sanar a su hijo, que se estaba muriendo. La Biblia Textual 3a Edicion Éste oyó que Jesús llegaba de Judea a Galilea, y fue a Él, y le rogaba que bajara y sanara a su hijo, pues estaba a punto de morir. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Cuando este funcionario se enteró de que Jesús había vuelto de Judea a Galilea fue a verlo para rogarle que bajara para curar a su hijo, que estaba ya para morir. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Este, cuando oyó que Jesús venía de Judea a Galilea, vino a Él y le rogó que descendiese y sanase a su hijo, porque estaba a punto de morir. |
DIOS es nuestro refugio y fortaleza; socorro muy bien experimentado en las angustias.
MAS habiendo nacido Jesús en Bet-lehem de Judea, en días del rey Herodes, he aquí que vinieron magos de las regiones orientales a Jerusalem,
Y cuando oyó decir que era Jesús de Nazaret quien pasaba, comenzó a clamar y a decir: ¡Jesús, Hijo de David, ten piedad de mí!
Y he aquí un hombre llamado Jairo, el cual era jefe de la sinagoga, vino, y cayendo a los pies de Jesús, le rogaba que entrase en su casa;
Marta entonces dijo a Jesús: Señor, si hubieras estado aquí, no hubiera muerto mi hermano.
Así pues María, cuando llegó a donde Jesús estaba, al verle, cayó a sus pies, diciéndole: ¡Señor, si hubieras estado aquí no hubiera muerto mi hermano!
Éste es el segundo milagro que hizo Jesús, cuando salió otra vez de Judea para Galilea.
Y como Lidda estaba cerca de Joppe, los discípulos, oyendo que Pedro estaba allí, le enviaron dos hombres, a suplicarle, diciendo: No te tardes en venir a nosotros.