Y ACONTECIÓ, después de estas cosas, que aprobó Dios a Abraham, y le dijo: ¡Abraham! Y él respondió: Heme aquí.
Juan 20:16 - Biblia Version Moderna (1929) Le dice Jesús: ¡María! Volviéndose ella, le dice en hebreo: ¡Rabboni! que quiere decir: Maestro. Περισσότερες εκδόσειςBiblia Reina Valera 1960 Jesús le dijo: ¡María! Volviéndose ella, le dijo: ¡Raboni! (que quiere decir, Maestro). Biblia Nueva Traducción Viviente —¡María! —dijo Jesús. Ella giró hacia él y exclamó: —¡Raboní! (que en hebreo significa “Maestro”). Biblia Católica (Latinoamericana) Jesús le dijo: 'María'. Ella se dio la vuelta y le dijo: 'Rabboní', que quiere decir 'Maestro'. La Biblia Textual 3a Edicion Jesús le dice: ¡Miriam! Ella, volviéndose, le dice en arameo: ¡Rabboni! (que quiere decir Maestro). Biblia Serafín de Ausejo 1975 Dícele Jesús: '¡María!'. Ella se vuelve y le dice en hebreo: '¡Rabbuní! ' (que significa 'Maestro'). Biblia Reina Valera Gómez (2023) Jesús le dijo: María. Volviéndose ella, le dijo: ¡Raboni! (que quiere decir, Maestro). |
Y ACONTECIÓ, después de estas cosas, que aprobó Dios a Abraham, y le dijo: ¡Abraham! Y él respondió: Heme aquí.
Entonces el Ángel de Jehová le llamó desde los cielos, y le dijo: ¡Abraham! ¡Abraham! Y él respondió: Heme aquí.
Y he aquí que vuestros ojos ven, y también los ojos de mi hermano Benjamín, que es mi misma boca la que os habla.
Y viendo Jehová que se desviaba para mirar, le llamó Dios de en medio de la zarza, diciendo: ¡Moisés! ¡Moisés! Y él respondió: Heme aquí.
Entonces Jehová respondió a Moisés: Yo haré esto también que has pedido; puesto que tú has hallado gracia en mis ojos, y yo te he conocido por nombre.
Muy poco fué lo que hube pasado adelante de ellos, cuando encontré al que ama mi alma. Asíme yo de él, y no quise soltarle hasta que le hube introducido en la casa de mi madre, y en la cámara de aquella que me concibió.
Yo dormía, pero estaba mi corazón velando- ¡Es la voz de mi amado, que está golpeando a la puerta: Ábreme, hermana mía, amiga mía, paloma mía, perfecta mía! porque mi cabeza está llena de rocío, y mis cabellos, de las gotas de la noche.
MAS ahora, dice Jehová que te creó, oh Jacob, y el que te formó, oh Israel: No temas; porque yo te he redimido; te he llamado por tu nombre; tú eres mío.
Pero al instante Jesús les habló, diciendo: ¡Tened ánimo; yo soy; no tengáis miedo!
Y respondiéndole Jesús, dijo ¿Qué quieres que yo te haga? El ciego le dijo: ¡Rabboni, que yo vea otra vez!
Pero Jesús respondiendo, le dijo: ¡Marta, Marta, cuidadosa estás, y te dejas turbar en cuanto a muchas cosas;
Volviéndose entonces Jesús, y viendo que le seguían, les dice: ¿Qué buscáis? Ellos le dicen: Rabbí (que traducido quiere decir, Maestro), ¿dónde moras?
Natanael le respondió: ¡Rabbí, tú eres el Hijo de Dios; tú eres el Rey de Israel!
A éste le abre el portero; y las ovejas oyen su voz: y él llama a sus propias ovejas por nombre, y las saca fuera.
¶Y cuando hubo dicho esto, se fué, y llamó a María su hermana secretamente, diciendo: El Maestro está aquí, y te llama.
Éste vino a Jesús de noche, y le dijo: Rabbí, sabemos que eres un maestro venido de Dios; porque nadie puede hacer estos milagros que tú haces, a menos que Dios esté con él.
Y en Jerusalem, junto a la puerta de las Ovejas, hay un estanque que en hebreo se llama Betesda, el cual tiene cinco pórticos.
Y hallándole al otro lado del mar, le dijeron: Rabbí ¿cuándo viniste acá?
vió éste claramente, en visión, como a la hora nona del día, a un ángel de Dios, que entraba a donde él estaba, y le decía: Cornelio.
y caído a tierra, oyó una voz que le decía: ¡Saulo! ¡Saulo! ¿por qué me persigues?
Entonces vino Jehová, y se detuvo, y llamó como las otras veces: ¡Samuel! ¡Samuel! Y respondió Samuel: Habla, que tu siervo escucha.
Y volvió Jehová a llamar otra vez: ¡Samuel! Levantóse pues Samuel y fué a Elí, diciendo: Heme aquí, que me llamaste. Mas él respondió: No te llamé, hijo mío; vuelve, acuéstate.