¡Sírvante pueblos, y póstrense delante de ti naciones: seas señor de tus hermanos, e inclínense a ti los hijos de tu madre! ¡Los que te maldijeren sean malditos, y benditos los que te bendijeren!
Génesis 42:10 - Biblia Version Moderna (1929) Y le respondieron: No, señor mío, sino que tus siervos han venido a comprar alimentos. Περισσότερες εκδόσειςBiblia Reina Valera 1960 Ellos le respondieron: No, señor nuestro, sino que tus siervos han venido a comprar alimentos. Biblia Nueva Traducción Viviente —¡No, mi señor! —exclamaron—. Sus siervos han venido simplemente a comprar alimento. Biblia Católica (Latinoamericana) Les dijo: 'Ustedes son espías y vienen a descubrir los secretos del país. Respondieron ellos: 'No, señor, tus siervos han venido a comprar alimentos. La Biblia Textual 3a Edicion Pero ellos le dijeron: No, señor mío, sino que tus siervos vinieron a comprar alimento. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Le contestaron: 'No, señor mío; tus siervos han venido a comprar víveres. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y ellos le respondieron: No, señor mío: mas tus siervos han venido a comprar alimentos. |
¡Sírvante pueblos, y póstrense delante de ti naciones: seas señor de tus hermanos, e inclínense a ti los hijos de tu madre! ¡Los que te maldijeren sean malditos, y benditos los que te bendijeren!
Mas Isaac respondió y dijo a Esaú: He aquí, por señor tuyo le he puesto, y le he dado por siervos a todos sus hermanos: de trigo también y de vino le he surtido; y por ti ¿qué podré hacer ahora, hijo mío?
Y le dijeron sus hermanos: ¿Reinarás tú sobre nosotros? ¿o te enseñorearás tú de nosotros? Y le aborrecieron todavía más a causa de sus sueños y sus palabras.
Todos nosotros somos hijos de un solo varón; hombres de bien somos; tus siervos no son espías.
Aquel de tus siervos con quien fuere hallada, que muera, y también nosotros seremos siervos de mi señor.
Estando pues Abdías en el camino, he aquí a Elías que venía a su encuentro. Y él le conoció, y cayó sobre su rostro y le dijo: ¿Eres tú mi señor Elías?
Y conoció Saúl la voz de David, y dijo: ¿Es ésta tu voz, hijo mío, David? Y respondió David: Mi voz es, señor mío, ¡oh rey!