Subieron también con él carros y gente de a caballo; y era el cortejo muy grande.
Cantares 1:9 - Biblia Version Moderna (1929) ¡A mi yegua favorita, en las carrozas de Faraón, te he comparado, oh amiga mía! Περισσότερες εκδόσειςBiblia Reina Valera 1960 A yegua de los carros de Faraón Te he comparado, amiga mía. Biblia Nueva Traducción Viviente Amada mía, tú eres tan cautivante como una yegua entre los sementales del faraón. Biblia Católica (Latinoamericana) Como yegua uncida al carro de Faraón,
así eres a mis ojos, amada mía. La Biblia Textual 3a Edicion Él A mi yegua favorita° entre los carros de Faraón te he comparado, Oh amada mía. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Eres, amada mía, como la yegua de la carroza del Faraón. Biblia Reina Valera Gómez (2023) A yegua de los carros de Faraón te he comparado, amada mía. |
Subieron también con él carros y gente de a caballo; y era el cortejo muy grande.
Y la saca de caballos (la cual corría por cuenta de Salomón), se hacía de Egipto, y por medio de la junta de los comerciantes del rey: los sacaba la junta a precios fijos.
¡He aquí que eres hermosa, oh amiga mía! ¡he aquí que eres hermosa! ¡tus ojos son como palomas!
Habla mi amado, y me dice: ¡Levántate, amiga mía, hermosa mía, y vente conmigo!
la higuera va madurando sus brevas, y las vides, en cierne, despiden su fragancia: ¡levántate, oh amiga mía, hermosa mía, y vente conmigo!
Como la azucena entre los espinos, así es mi amiga entre las doncellas.
¡HE aquí que eres hermosa, oh amiga mía, he aquí que eres hermosa! ¡Tus ojos son como palomas detrás de tu velo; tus cabellos, como manadas de cabras, que se recuestan en las laderas del monte Galaad;
Yo dormía, pero estaba mi corazón velando- ¡Es la voz de mi amado, que está golpeando a la puerta: Ábreme, hermana mía, amiga mía, paloma mía, perfecta mía! porque mi cabeza está llena de rocío, y mis cabellos, de las gotas de la noche.
¡Hermosa eres, oh amiga mía, como Tirsa, bella como Jerusalem, imponente como ejército con banderas tremolantes!
¡AY de los que bajan a Egipto por socorro, y se apoyan en caballos; y ponen su confianza en carros de guerra, porque son muchos, y en caballería, por ser muy fuerte; pero no miran al Santo de Israel, ni acuden a Jehová!