¶Entonces respondió el rey, y dijo a la mujer: Ruégote que no me encubras una cosa que voy a preguntarte. A lo que dijo la mujer: Ruégote que hable mi señor el rey.
2 Samuel 14:17 - Biblia Version Moderna (1929) Dijo entonces tu sierva: Ruégote que la respuesta de mi señor el rey sea tranquilizadora; puesto que como un ángel de Dios, así es mi señor el rey para entenderse en lo bueno y lo malo. ¡Y Jehová tu Dios sea contigo! Περισσότερες εκδόσειςBiblia Reina Valera 1960 Tu sierva, pues, dice: Sea ahora de consuelo la respuesta de mi señor el rey, pues que mi señor el rey es como un ángel de Dios para discernir entre lo bueno y lo malo. Así Jehová tu Dios sea contigo. Biblia Nueva Traducción Viviente Sí, mi señor el rey nos devolverá la tranquilidad de espíritu”. Sé que usted es como un ángel de Dios que puede distinguir entre lo bueno y lo malo. Que el Señor su Dios esté con usted. Biblia Católica (Latinoamericana) Y me dije: 'Ojalá el señor rey pudiera decir tan sólo una palabra apaciguante, porque el rey es como un ángel de Dios, que comprende el bien y el mal. Que Yavé tu Dios esté contigo'. La Biblia Textual 3a Edicion También tu sierva se dijo: Que la palabra de mi señor el rey sea para mi consuelo, ya que como un ángel° de Dios, así es mi señor el rey para discernir entre el bien y el mal, pues YHVH tu Dios está contigo. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Y además se dijo tu sierva: 'Sírvame de alivio la palabra del rey, mi señor; pues es como el ángel de Yahveh para oír lo bueno y lo malo'. ¡Que Yahveh, tu Dios, sea contigo!'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Tu sierva, pues, dice: Que la palabra de mi señor el rey sea para consuelo; pues que mi señor el rey es como un ángel de Dios para escuchar lo bueno y lo malo. Así Jehová tu Dios sea contigo. |
¶Entonces respondió el rey, y dijo a la mujer: Ruégote que no me encubras una cosa que voy a preguntarte. A lo que dijo la mujer: Ruégote que hable mi señor el rey.
Para trocar la apariencia de la cosa hizo tu siervo Joab esto; y mi señor es sabio, conforme a la sabiduría de un ángel de Dios, para entender todo lo que se hace en la tierra.
Además, ha calumniado a tu siervo delante de mi señor el rey: mas mi señor el rey es como un ángel de Dios: haz pues lo que sea bueno a tus ojos.
Porque aun cuando todos los de la casa de mi padre no éramos sino dignos de muerte para con mi señor el rey, sin embargo pusiste a tu siervo entre los que comen a tu mesa: ¿qué derecho pues me queda todavía para reclamar más de parte del rey?
Y oyó todo Israel el fallo que había dado el rey; y temieron todos delante de él: porque vieron que había en él sabiduría de Dios, para administrar justicia.
Da pues a tu siervo un corazón inteligente, para juzgar a tu pueblo, para poder distinguir entre el bien y el mal; porque ¿quién es capaz de juzgar este tu pueblo tan grande?
¿Habrá iniquidad en mi lengua? ¿acaso mi paladar no puede distinguir cosas inicuas?
Lo que es el crisol para la plata, y el hornillo para el oro, eso es al hombre la boca que le alaba.
Pero el alimento sólido es de los hombres hechos; es decir, de aquéllos que por medio del uso, tienen sus sentidos ejercitados para discernir el bien y el mal.
De la misma manera que obedecimos a Moisés en todas las cosas, así te obedeceremos a ti; con tal que Jehová tu Dios sea contigo como fué con Moisés.
Entonces respondió Aquís, y dijo a David: Yo sé que eres bueno en mis ojos como un ángel de Dios; esto no obstante, los príncipes de los Filisteos ya han dicho: No subirá con nosotros a la batalla.