y tengo bueyes, y asnos, y rebaños, y siervos y siervas; y he enviado a avisar a mi señor, para hallar gracia en sus ojos.
1 Samuel 1:18 - Biblia Version Moderna (1929) A lo cual ella respondió: ¡Halle tu sierva gracia en tus ojos! y la mujer se fué por su camino, y comió, y su cara ya no era como antes. Περισσότερες εκδόσειςBiblia Reina Valera 1960 Y ella dijo: Halle tu sierva gracia delante de tus ojos. Y se fue la mujer por su camino, y comió, y no estuvo más triste. Biblia Nueva Traducción Viviente —¡Oh, muchas gracias! —exclamó ella. Así que se fue, comenzó a comer de nuevo y ya no estuvo triste. Biblia Católica (Latinoamericana) Ella le dijo a su vez: '¡Ojalá tu sirvienta sea bien vista por ti!' Se levantó, comió, y su cara tenía otro aspecto. La Biblia Textual 3a Edicion Ella dijo: ¡Halle tu sierva gracia ante tus ojos! Y la mujer se fue por su camino, y comió, y su semblante ya no fue como antes.° Biblia Serafín de Ausejo 1975 Replicó ella: 'Que tu sierva alcance tu favor'. La mujer emprendió su camino; comió, y su semblante no fue ya como el de antes. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y ella dijo: Halle tu sierva gracia delante de tus ojos. Y la mujer siguió su camino, y comió, y no estuvo más triste. |
y tengo bueyes, y asnos, y rebaños, y siervos y siervas; y he enviado a avisar a mi señor, para hallar gracia en sus ojos.
Y los mensajeros volvieron a Jacob, diciendo: Llegamos a tu hermano Esaú, y también él viene a tu encuentro, y cuatrocientos hombres con él.
Dijo entonces Esaú: Permite que ponga a tu servicio parte de la gente que está conmigo. Mas dijo Jacob: ¿Para qué esto? ¡Halle yo gracia en los ojos de mi señor!
Dijo Esaú además: ¿Qué propones con toda esta muchedumbre de ganado que acabo de encontrar? A lo que respondió Jacob: Es para hallar gracia en los ojos de mi señor.
¶Véte pues; come tu pan con regocijo, y bebe tu vino con alegre corazón: puesto que ya ha mucho que Dios se complace en tus obras.
Hasta ahora no habéis pedido nada en mi nombre: pedid, y recibiréis, para que vuestro gozo sea completo.
Y el Dios de la esperanza os llene de todo gozo y paz, por medio de la fe, para que abundéis en esperanza, en virtud del poder del Espíritu Santo.
A lo que ella respondió: ¡Halle yo gracia en tus ojos, señor mío! porque me has consolado, y porque has hablado cariñosamente a tu sierva; aunque yo no sea como una de estas tus siervas.
Y dijo Rut la moabita a Noemí: Me iré, si te parece, al campo, y recogeré espigas en pos de cualquiera en cuyos ojos yo hallare gracia. Y ella dijo: Anda, hija mía.