1 Samuel 29:11 - Biblia Traducción en Lenguaje Actual11 De modo que, al amanecer, David y sus hombres regresaron a la tierra de los filisteos. Mientras tanto, los filisteos se dirigieron a Jezreel. Tan-awa ang kapituloDugang nga mga bersyonBiblia Reina Valera 196011 Y se levantó David de mañana, él y sus hombres, para irse y volver a la tierra de los filisteos; y los filisteos fueron a Jezreel. Tan-awa ang kapituloBiblia Nueva Traducción Viviente11 Entonces David y sus hombres regresaron a la tierra de los filisteos, mientras que el ejército filisteo avanzó hasta Jezreel. Tan-awa ang kapituloBiblia Católica (Latinoamericana)11 David y sus hombres se levantaron pues muy de mañana y partieron temprano al país de los filisteos; los filisteos, en cambio, subieron hasta Yizreel. Tan-awa ang kapituloLa Biblia Textual 3a Edicion11 Entonces David y sus hombres se levantaron muy de mañana, para irse y volver a la tierra de los filisteos; y los filisteos marcharon a Jezreel. Tan-awa ang kapituloBiblia Serafín de Ausejo 197511 Madrugaron, pues, David y sus hombres para salir de mañana en viaje de retorno hacia el país de los filisteos. Y los filisteos, por su parte, subieron hacia Yizreel. Tan-awa ang kapituloBiblia Reina Valera Gómez (2023)11 Y David se levantó temprano, él y sus hombres, para partir por la mañana y regresar a la tierra de los filisteos. Y los filisteos subieron a Jezreel. Tan-awa ang kapitulo |
Los filisteos reunieron todo su ejército en Afec. Sus jefes marchaban al frente de grupos de cien y de mil soldados. Los israelitas, por su parte, acamparon cerca del arroyo que está en Jezreel. Cuando los filisteos vieron que al final de su ejército pasaba el rey Aquís junto con David y sus hombres,
Al tercer día, David y sus hombres llegaron a Siclag y descubrieron que los amalecitas habían atacado el desierto del sur. A Siclag le habían prendido fuego y, aunque no mataron a nadie, se habían llevado como esclavos a mujeres, ancianos y niños. Entre las mujeres, se habían llevado a Ahinóam y a Abigail, las esposas de David. Al ver esto, David y sus hombres se echaron a llorar, hasta que ya no tuvieron más fuerzas.