1 Reyes 10:27 - La Biblia Textual 3a Edicion27 Y el rey hizo que la plata fuera en Jerusalem como las piedras, y los cedros como los sicómoros de la Sefelá. Tan-awa ang kapituloDugang nga mga bersyonBiblia Reina Valera 196027 E hizo el rey que en Jerusalén la plata llegara a ser como piedras, y los cedros como cabrahígos de la Sefela en abundancia. Tan-awa ang kapituloBiblia Nueva Traducción Viviente27 El rey hizo que en Jerusalén la plata fuera tan abundante como las piedras. Además, la valiosa madera de cedro era tan común como la higuera sicómoro que crece en las colinas de Judá. Tan-awa ang kapituloBiblia Católica (Latinoamericana)27 El rey actuó tan bien que en Jerusalén la plata era tan común como las piedras, y los cedros tan numerosos como los sicómoros de la planicie costera. Tan-awa ang kapituloBiblia Serafín de Ausejo 197527 El rey consiguió que la plata abundara en Jerusalén tanto como las piedras, y los cedros tanto como los sicómoros de la Tierra Baja. Tan-awa ang kapituloBiblia Reina Valera Gómez (2023)27 E hizo el rey que en Jerusalén la plata llegara a ser como las piedras, y los cedros como los sicómoros que se dan en abundancia en los valles. Tan-awa ang kapituloBiblia Traducción en Lenguaje Actual27-29 Los comerciantes de la corte compraban en Egipto y Cilicia los caballos para Salomón. El precio de un carro comprado en Egipto era de seiscientas monedas de plata, y el de un caballo, ciento cincuenta. El rey Salomón acumuló en Jerusalén grandes cantidades de plata, y sembró tantos árboles de cedro que llegaron a ser tan comunes como las flores del campo. ¡Hasta los reyes hititas y sirios compraban sus carros y caballos a los comerciantes de la corte de Salomón! Tan-awa ang kapitulo |