Biblia Todo Logo
Online nga Bibliya
- Mga paanunsiyo -





Jeremías 17:16 - Biblia Nacar-Colunga

16 Pero yo no he ido tras ti a incitarte al mal, ni he deseado el día de la calamidad; tú lo sabes. Lo que ha salido de mis labios, ante tu presencia está.'

Tan-awa ang kapitulo Kopyaha


Dugang nga mga bersyon

Biblia Reina Valera 1960

16 Mas yo no he ido en pos de ti para incitarte a su castigo, ni deseé día de calamidad, tú lo sabes. Lo que de mi boca ha salido, fue en tu presencia.

Tan-awa ang kapitulo Kopyaha

Biblia Nueva Traducción Viviente

16 Señor, no he abandonado mi labor como pastor de tu pueblo ni he insistido que mandes desastres. Tú has oído todo lo que dije.

Tan-awa ang kapitulo Kopyaha

Biblia Católica (Latinoamericana)

16 A pesar de esto yo no te he obligado a lo peor, no he anhelado que llegue el día fatal, tú lo sabes bien; todo lo que ha salido de mis labios está claro para ti.

Tan-awa ang kapitulo Kopyaha

La Biblia Textual 3a Edicion

16 Pero yo no he hecho más que ser un pastor en pos de ti. No he deseado este día de calamidad, Tú lo sabes: lo que ha salido de mis labios está presente ante ti.

Tan-awa ang kapitulo Kopyaha

Biblia Serafín de Ausejo 1975

16 Yo no insistí en ser pastor a tu servicio, ni el día fatal lo deseé. Tú lo sabes: lo que salió de mis labios delante de tu presencia está.

Tan-awa ang kapitulo Kopyaha




Jeremías 17:16
21 Cross References  

Y tú, Señor, me conoces; tú me ves; tú has probado mi corazón en lo referente a ti. Sepáralos como rebaño destinado a la matanza, conságralos para el día de la mortandad.'


Si no escucháis, mi alma llorará en secreto vuestra soberbia, y mis ojos derramarán abundantes lágrimas, porque ha sido hecho cautivo el rebaño de Yahvé.


Tú lo sabes, Yahvé: Acuérdate de mí y mira por mí, y véngame de mis perseguidores. No contengas tu ira. Mira que por ti soporto oprobios


¿Se paga por ventura mal por bien? Pues me cavan una hoya. Acuérdate cómo me presenté ante ti para hablar en favor suyo, para apartar de ellos tu indignación.


Tú me sedujiste, ¡oh Yahvé! y yo me dejé seducir. Tú eras el más fuerte, y fui vencido. Ahora soy todo el día la irrisión, la burla de todo el mundo.


Y aunque me dije: “No me acordaré de él, no volveré a hablar en su nombre,” es dentro de mí como fuego abrasador, encerrado dentro de mis huesos, y me he fatigado por soportarlo, pero no puedo.


(2) ¡Ojalá tuviera en el desierto un albergue de caminantes! Y dejaría a mi pueblo y me iría lejos de ellos, pues todos son adúlteros, gavilla de ladrones.


En las puertas detestan al censor y aborrecen al que habla rectamente.


cómo no omití nada de cuanto os fuera de provecho, predicándoos y enseñándoos en público y en privado,


pues os he anunciado plenamente el consejo de Dios.


Pues ésta es nuestra gloria, el testimonio de nuestra conciencia. Que no en sabiduría carnal, sino en la santidad y sinceridad de Dios, en la gracia de Dios, hemos vivido en el mundo, y más especialmente entre vosotros.


Porque no somos como muchos, que trafican con la palabra de Dios, sino que sinceramente, como de Dios, hablamos delante de Dios en Cristo.


Sabéis, hermanos míos carísimos, que todo hombre debe ser pronto para escuchar, tardo para hablar, tardo para airarse,


Hermanos míos, no seáis muchos en pretender haceros maestros, sabiendo que seremos juzgados más severamente, 2a porque todos ofendemos en mucho.


Sunda kami:

Mga paanunsiyo


Mga paanunsiyo