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Éxodo 4:31 - Biblia Nacar-Colunga

31 El pueblo creyó, y al ver que Yahvé había visitado a los hijos de Israel y había atendido a su aflicción, postrándose, le adoraron.

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Dugang nga mga bersyon

Biblia Reina Valera 1960

31 Y el pueblo creyó; y oyendo que Jehová había visitado a los hijos de Israel, y que había visto su aflicción, se inclinaron y adoraron.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

31 Entonces el pueblo de Israel quedó convencido de que el Señor había enviado a Moisés y a Aarón. Cuando supieron que el Señor se preocupaba por ellos y que había visto su sufrimiento, se inclinaron y adoraron.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

31 El pueblo creyó; comprendieron que Yavé había visto sus humillaciones y venía a visitar a los hijos de Israel. Postrados en tierra, adoraron.

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La Biblia Textual 3a Edicion

31 El pueblo creyó, y al oír que YHVH se ocupaba de los hijos de Israel, y había visto su aflicción, hicieron reverencia y se postraron.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

31 El pueblo creyó y, al tener noticia de que Yahveh había visitado a los israelitas y había visto su humillación, se postraron y lo adoraron.

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Éxodo 4:31
27 Cross References  

Cayó Abram rostro a tierra y siguió diciéndole Yahvé:


Postróse entonces el hombre y adoró a Yahvé,


Concibió Lía, y parió un hijo, al que llamó Rubén, diciendo: “Yahvé ha mirado mi aflicción, y ahora mi marido me amará.”


José dijo a sus hermanos: “Voy a morir, pero Dios ciertamente os visitará y os hará subir de esta tierra a la tierra que juró dar a Abraham, Isaac y Jacob.”


Luego dijo David a toda la asamblea: “Bendecid ahora a Yahvé, vuestro Dios”; y toda la asamblea bendijo a Yahvé, Dios de sus padres, y, postrándose, oraron ante Yahvé y ante el rey.'


Echóse entonces Josafat rostro a tierra, y todo Judá y todos los moradores de Jerusalén se postraron ante Yahvé, adorándole.


El tiene el brazo de carne; pero con nosotros está Yahvé, nuestro Dios, para ayudarnos y combatir nuestros combates.” El pueblo cobró valor con las palabras de Ezequías, rey de Judá.'


Al ver los hijos de Israel descender el fuego y la gloria de Yahvé sobre la casa, cayeron a tierra sobre sus rostros en el pavimento y adoraron y confesaron a Yahvé: “Porque es bueno, porque es eterna su misericordia.”


Bendijo entonces Esdras a Yahvé, Dios grande, y todo el pueblo alzando las manos, respondió: “Amén, amén”; y, postrándose, adoraron a Yahvé rostro a tierra.'


Levantóse entonces Job, rasgó sus vestiduras, rasuró su cabeza y, echándose en tierra, adoró,


les responderéis: Es el sacrificio de la Pascua de Yahvé, que pasó de largo por las casas de los hijos de Israel en Egypto cuando hirió a Egipto, salvando nuestras casas.” El pueblo se prosternó y adoró.


Israel vio la mano potente que mostró Yahvé para con Egipto, y el pueblo temió a Yahvé, y creyó en Yahvé y en Moisés, su siervo.


El pueblo todo entero respondió: “Nosotros haremos todo cuanto ha dicho Yahvé.” Moisés fue a transmitir a Yahvé las palabras del pueblo,


y Yahvé dijo a Moisés: “Yo vendré a ti en densa nube, para que vea el pueblo que yo hablo contigo y tenga siempre fe en mí.”


Miró Dios a los hijos de Israel y atendió.


“Ve, reúne a los ancianos de Israel y diles: Yahvé, el Dios de vuestros padres, el Dios de Abraham, de Isaac y de Jacob, se me ha aparecido y me ha encomendado que os diga: Os he visitado y he visto lo que hacéis en Egipto,


Ellos te escucharán, y tú, con los ancianos de Israel, irás al rey de Egipto y le diréis: Yahvé, el Dios de los hebreos, se nos ha mostrado. Deja, pues, que vayamos camino de tres días por el desierto para sacrificar a Yahvé, nuestro Dios.


Yahvé le dijo: “He visto la aflicción de mi pueblo en Egipto y he oído los clamores que le arranca su opresión, y conozco sus angustias.


Todo el pueblo, al ver la columna de nube parada ante la tienda, se alzaba y se prosternaba a la entrada de sus tiendas.


Moisés se echó en seguida a tierra, y, prosternándose,


“Para que crean que se te ha aparecido Yahvé, el Dios de tus padres, el Dios de Abraham, de Isaac y de Jacob.”


Y será el litoral (marítimo) para el resto de la casa de Judá, allí apacentará. Dormirán por la noche en las casas de Ascalón, porque los visitará Yahvé, su Dios, y los restaurará.


Bendito el Señor, Dios de Israel, porque ha visitado y redimido a su pueblo,


Los que están sobre peña son los que, cuando oyen, reciben con alegría la palabra, pero no tienen raíces; creen por algún tiempo, pero al tiempo de la tentación sucumben.'


Levantóse la mujer con sus dos nueras para dejar la tierra de Moab, pues había oído decir que había mirado Yahvé a su pueblo, dándole pan.


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