Nun-. Su palabra es para mis pies una lámpara, la luz de mi sendero.
Números 8:2 - Biblia Nacar-Colunga “Habla a los hijos de Aarón y diles: Cuando pongas las lámparas del candelabro, ponías de modo que las siete alumbren hacia adelante.” Dugang nga mga bersyonBiblia Reina Valera 1960 Habla a Aarón y dile: Cuando enciendas las lámparas, las siete lámparas alumbrarán hacia adelante del candelero. Biblia Nueva Traducción Viviente «Da las siguientes instrucciones a Aarón: cuando pongas las siete lámparas en el candelabro, hazlo de manera que la luz alumbre hacia adelante, enfrente del candelabro». Biblia Católica (Latinoamericana) Di a Aarón: Cuando dispongas las lámparas, las colocarás de manera que las siete lámparas alumbren hacia la parte delantera del candelabro. La Biblia Textual 3a Edicion Habla a Aarón, y dile: Cuando hagas montar las lámparas, las siete lámparas deberán alumbrar hacia la parte delantera del candelabro. Biblia Serafín de Ausejo 1975 'Habla a Aarón y dile: cuando coloques las lámparas, cuida de que las siete lámparas alumbren hacia la parte delantera del candelabro'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Habla a Aarón, y dile: Cuando encendieres las lámparas, las siete lámparas alumbrarán hacia el frente del candelero. |
Nun-. Su palabra es para mis pies una lámpara, la luz de mi sendero.
La explicación de tus palabras ilumina y da inteligencia a los sencillos.
Harás para él siete lámparas, que pondrás sobre el candelabro para que luzcan de frente.
Hizo siete lámparas con sus despabiladeras y su plato de oro, de oro puro todo.
el candelabro de oro puro con sus lámparas; las lámparas que habían de ponerse en él; todos sus utensilios y el aceite para las lámparas;'
y colocó en él las lámparas, como Yahvé se lo había mandado a Moisés.
Por la ley y el testimonio. Si no hablan según esta palabra, no hay aurora para ellos.
Dispondrás siempre las lámparas en el candelabro de oro puro, para que ardan continuamente ante Yahvé.
Así lo hizo Aarón, y puso las lámparas en la parte anterior del candelabro, como Yahvé se lo había mandado a Moisés.
Vosotros sois la luz del mundo. No puede ocultarse una ciudad asentada sobre un monte.
Era la luz verdadera, (luz) que viniendo a este mundo ilumina a todo hombre.
Y tenernos aún algo más firme, a saber: la palabra profética, a la cual muy bien hacéis en atender, como a lámpara que luce en lugar tenebroso hasta que luzca el día y el lucero se levante en vuestros corazones.
Cuanto al misterio de las siete estrellas que has visto en mi diestra y los siete candeleros de oro, las siete estrellas son los ángeles de las siete iglesias, y los siete candeleros las siete iglesias.
Salían del trono relámpagos, y voces, y truenos, y siete lámparas de fuego ardían delante del trono, que eran los siete espíritus de Dios.