”Un mal infernal se ceba en él; se acostó para no volver a levantarse.”
Juan 6:71 - Biblia Nacar-Colunga Hablaba de Judas Iscariote, porque éste, uno de los Doce, había de entregarle. Dugang nga mga bersyonBiblia Reina Valera 1960 Hablaba de Judas Iscariote, hijo de Simón; porque este era el que le iba a entregar, y era uno de los doce. Biblia Nueva Traducción Viviente Se refería a Judas, hijo de Simón Iscariote, uno de los doce, quien más tarde lo traicionaría. Biblia Católica (Latinoamericana) Jesús se refería a Judas Iscariote, hijo de Simón, pues era uno de los Doce y lo iba a traicionar. La Biblia Textual 3a Edicion Y se refería a Judas, hijo° de Simón Iscariote, uno de los doce, porque éste habría de entregarlo. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Se refería así a Judas, el de Simón Iscariote, porque éste, uno de los Doce, lo iba a entregar. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y hablaba de Judas Iscariote, hijo de Simón, porque este era el que le iba a traicionar, y era uno de los doce. |
”Un mal infernal se ceba en él; se acostó para no volver a levantarse.”
Los nombres de los doce apóstoles son éstos: el primero Simón, llamado Pedro, y Andrés, su hermano; Santiago el de Zebedeo y Juan, su hermano;'
Judas Iscariote, uno de los Doce, se fue a los príncipes de los sacerdotes para entregarlo.
Judas Iscariote, uno de sus discípulos, el que había de entregarle, dijo:
Y comenzada la cena, como el diablo hubiese ya puesto en el corazón de Judas Iscariote, hijo de Simón, el propósito de entregar le;'
Jesús le contestó: Aquel para quien Yo mojare un bocado y se lo diese. Y, mojando un bocado, lo tomó y se lo dio a Judas, hijo de Simón Iscariote.
Tomás, uno de los doce, llamado Dídimo, no estaba con ellos cuando vino Jesús. Dijéronle, pues, los otros discípulos: Hemos visto al Señor.
pero hay algunos de vosotros que no creen. Porque sabía Jesús, desde el principio, quiénes eran los que no creían y quién era el que había de entregarle.
Respondióle Jesús: ¿No he elegido yo a los Doce? Y uno de vosotros es diablo.
a éste, entregado según los designios de la presciencia de Dios, le alzasteis en la cruz y le disteis muerte por mano de los infieles.
Porque disimuladamente se han introducido algunos impíos, ya desde antiguo señalados para esta condenación, que convierten en lascivia la gracia de nuestro Dios y niegan al único Dueño y Señor nuestro, Jesucristo.