Aquel día castigará Yahvé con su espada pesada, grande y poderosa, al leviatán serpiente huidiza; al leviatán serpiente tortuosa, y matará al monstruo que está en el mar.'
Apocalipsis 12:3 - Biblia Nacar-Colunga Apareció en el cielo otra señal, y vi un gran Dragón, de color de fuego, que tenía siete cabezas y diez cuernos, y sobre la cabeza siete coronas. Dugang nga mga bersyonBiblia Reina Valera 1960 También apareció otra señal en el cielo: he aquí un gran dragón escarlata, que tenía siete cabezas y diez cuernos, y en sus cabezas siete diademas; Biblia Nueva Traducción Viviente Luego fui testigo de otro suceso importante en el cielo. Vi a un gran dragón rojo con siete cabezas y diez cuernos, y una corona en cada cabeza. Biblia Católica (Latinoamericana) Apareció también otra señal: un enorme dragón rojo con siete cabezas y diez cuernos, y en las cabezas siete coronas;' La Biblia Textual 3a Edicion Otra señal fue vista° en el cielo: he aquí un gran dragón rojo, que tenía siete cabezas y diez cuernos,° y en sus cabezas, siete diademas, Biblia Serafín de Ausejo 1975 Y apareció otra señal en el cielo: un gran dragón de un rojo encendido, que tenía siete cabezas y diez cuernos y, sobre sus cabezas, siete diademas. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y fue vista otra señal en el cielo; y he aquí un gran dragón bermejo, que tenía siete cabezas y diez cuernos, y en sus cabezas siete diademas. |
Aquel día castigará Yahvé con su espada pesada, grande y poderosa, al leviatán serpiente huidiza; al leviatán serpiente tortuosa, y matará al monstruo que está en el mar.'
Despierta, despierta, revístete de fortaleza, brazo de Yahvé. Despierta, como los tiempos anteriores, en las generaciones antiguas. ¿No eres tú quien destrozaste a Rahab y atravesaste al dragón?
Los ancianos, los magnates: he ahí a la cabeza; el profeta, doctor de mentiras: he ahí la cola.'
Lo que viste de los pies y los dedos, parte de barro de alfarero, parte de hierro, es que este reino será dividido, pero tendrá en sí algo de la fortaleza del hierro, aunque viste el hierro mezclado con el barro.
Y el ser los dedos parte de hierro, parte de barro, es que este reino será en parte fuerte y en parte frágil.
así como también acerca de los diez cuernos que tenía en la cabeza y de aquel otro que le había salido, y ante el cual se le habían caído tres, y que tenía ojos y boca que decía grandes arrogancias, y parecía más grande que todos los otros.
Los diez cuernos son diez reyes que en aquel reino se alzarán, y tras ellos se alzará otro que diferirá de los primeros y derribará a tres de estos reyes.
Apareció en el cielo una señal grande, una Mujer envuelta en el sol, con la luna debajo de sus pies, y sobre la cabeza una corona de doce estrellas,
Cuando el dragón se vio precipitado en la tierra, se dio a perseguir a la mujer que había parido al Hijo varón.
Se enfureció el dragón contra la mujer, y fuese a hacer la guerra contra el resto de su descendencia, contra los que guardan los preceptos de Dios y tienen el testimonio de Jesús.
Con su cola arrastró la tercera parte de los astros del cielo, y los arrojó a la tierra. Se paró el Dragón delante de la Mujer, que estaba a punto de parir, para tragarse a su Hijo en cuanto le pariese.
Hubo una batalla en el cielo: Miguel y sus ángeles peleaban con el Dragón,
Fue arrojado el Dragón grande, la antigua serpiente, llamada diablo y Satanás, que extravía a toda la redondez de la tierra, y fue precipitado en la tierra, y sus ángeles fueron con él precipitados.
Vi cómo salía del mar una bestia que tenía diez cuernos y siete cabezas, y sobre los cuernos diez diademas, y sobre las cabezas nombres de blasfemia.
Era la bestia que yo vi semejante a una pantera, y sus pies eran como de oso, y su boca como la boca de un león. Diole el dragón su poder, su trono y una autoridad muy grande.
Adoraron al dragón, porque había dado el poder a la bestia, y adoraron a la bestia, diciendo: ¿Quién como la bestia? ¿Quién podrá guerrear con ella?
Vi en el cielo otra señal grande y maravillosa, siete ángeles que tenían siete plagas, las postreras, porque con ellas se consuma la ira de Dios.
Y vi que de la boca del dragón, y de la boca de la bestia, y de la boca del falso profeta salían tres espíritus inmundos, como ranas,
Los diez cuernos que ves son diez reyes, los cuales no han recibido aún la realeza, pero con la bestia recibirán la autoridad de reyes por una hora.
Los diez cuernos que ves, igual que la bestia, aborrecerán a la ramera, y la dejarán desolada y desnuda, y comerán sus carnes, y la quemarán al fuego.
Díjome el ángel: ¿De qué te maravillas? Yo te declararé el misterio de la mujer y de la bestia que la lleva, que tiene siete cabezas y diez cuernos.
Sus ojos son como llama de fuego, lleva en su cabeza muchas diademas, y tiene un nombre escrito que nadie conoce sino él mismo,
Cogió al dragón, la serpiente antigua, que es el diablo, Satanás, y le encadenó por mil años.