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1 Samuel 4:18 - Biblia Nacar-Colunga

Apenas hubo mentado el arca de Dios, cayó Helí de su silla hacia atrás, junto a la puerta, y se desnucó y murió, pues era ya muy anciano y estaba muy pesado. Había juzgado a Israel durante cuarenta años.

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Biblia Reina Valera 1960

Y aconteció que cuando él hizo mención del arca de Dios, Elí cayó hacia atrás de la silla al lado de la puerta, y se desnucó y murió; porque era hombre viejo y pesado. Y había juzgado a Israel cuarenta años.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

Cuando el mensajero mencionó lo que había sucedido al arca de Dios, Elí cayó de espaldas de su asiento junto a la puerta. Se quebró la nuca y murió, porque era viejo y demasiado gordo. Durante cuarenta años había sido el juez de Israel.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

En cuanto mencionó el arca de Dios, Helí cayó de espaldas de su silla, atravesándose en la puerta. Se rompió la nuca y murió, porque el viejo era pesado. Había juzgado a Israel durante cuarenta años.

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La Biblia Textual 3a Edicion

Y cuando hizo mención del Arca de Dios, aconteció que cayó de su silla hacia atrás, junto a la puerta, y se le quebró la cerviz, y murió, porque era hombre viejo y pesado. Él había juzgado a Israel cuarenta años.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

Al oír mencionar el arca de Dios, Elí cayó de la silla hacia atrás, junto a la puerta; se le quebró la nuca y murió, pues era ya anciano y estaba torpe. Había juzgado a Israel durante cuarenta años.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Y aconteció que cuando él hizo mención del arca de Dios, Elí cayó hacia atrás de la silla al lado de la puerta, y se le quebró la cerviz y murió; pues era hombre viejo y pesado. Y había juzgado a Israel cuarenta años.

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1 Samuel 4:18
15 Cross References  

¡Oh Yahvé! yo amo la morada de tu casa, el lugar en que se asienta tu gloria.


Digo a Dios: ¡oh Roca mía! ¿Por qué te has olvidado de mí? ¿Por qué he de andar en luto bajo la opresión del enemigo?


Mi alma está sedienta de Dios, del Dios vivo: ¿Cuándo iré y veré la faz de Dios?


He venido a ser extraño para mis hermanos, y extranjero para los hijos de mi madre.


Dijo Moisés a Aarón: “Esto es lo que declaró Yahvé al decir: Yo me mostraré santo en aquellos que se me acercan y glorificado ante el pueblo todo.” Aarón calló.


Sansón juzgó a Israel, en tiempo de los filisteos, durante veinte años.


Cuando llegó, estaba Helí sentado en una silla, a la vera del camino, cerca de la puerta, esperando, pues su corazón temblaba por el arca de Dios. Entró el hombre en la ciudad para informarla, y toda ella fue un grito.


El le contestó: “Israel ha huido ante los filisteos; ha habido muchos muertos del pueblo; también tus dos hijos, Ofni y Finés, han sido muertos, y el arca de Dios ha sido tomada.”


Su nuera, la mujer de Finés, estaba encinta, ya para dar a luz. Al saber la noticia de la toma del arca de Dios, de la muerte de su suegro y de su marido, se doblegó y parió, pues le sobrevinieron los dolores del parto.