Biblia Todo Logo
La Biblia Online
- Anuncios -





Rut 4:1 - Versión Biblia Libre

1 Booz fue a la puerta de la ciudad, y se sentó allí. El redentor de la familia que Booz había mencionado pasó por allí, así que Booz le dijo: “Ven aquí, amigo, y siéntate”. El hombre se acercó y se sentó.

Ver Capítulo Copiar


Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

1 Booz subió a la puerta y se sentó allí; y he aquí pasaba aquel pariente de quien Booz había hablado, y le dijo: Eh, fulano, ven acá y siéntate. Y él vino y se sentó.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Nueva Traducción Viviente

1 Booz fue a la puerta de la ciudad y allí se sentó. En ese momento, pasó por ese lugar el redentor de la familia que Booz había mencionado, así que lo llamó: —Amigo, ven, siéntate aquí. Quiero hablar contigo. Así que se sentaron juntos.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Católica (Latinoamericana)

1 Booz se sentó al lado de la puerta de la ciudad a esperar que pasara el pariente que debía rescatar a Rut.

Ver Capítulo Copiar

La Biblia Textual 3a Edicion

1 Booz subió a la puerta y se sentó allí; y he aquí pasaba aquel pariente más cercano, del cual Booz había hablado, y le dijo: ¡Eh, fulano,° ven acá y siéntate! Y él se desvió y se sentó.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Serafín de Ausejo 1975

1 Booz subió a la puerta de la ciudad y se sentó allí, precisamente cuando pasaba el que tenía derecho de rescate, del que había hablado Booz, y le dijo: 'Oye, fulano, acércate y siéntate aquí'. Se acercó y se sentó.

Ver Capítulo Copiar




Rut 4:1
21 Referencias Cruzadas  

Los dos ángeles llegaron esa noche a Sodoma. Y Lot estaba sentado en la puerta de la ciudad. Y cuando vio a los hombres se levantó para recibirlos, y se inclinó con su rostro en tierra.


Efrónel hitita estaba allí sentado en medio de su pueblo. Y le respondió a Abraham en presencia de los hititas que estaban en las puertas de la ciudad.


Hamor y Siquem fueron a la puerta del pueblo y hablaron con los otros líderes allí.


Solía levantarse temprano y se colocaba junto al camino principal que conducía a la puerta de la ciudad. Cuando la gente llevaba un caso al rey para que decidiera, Absalón los llamaba y les preguntaba: “¿De qué ciudad son ustedes?” . Si respondían: “Tu siervo es de tal tribu de Israel”,


Vestidos con sus ropas reales, el rey de Israel y el rey Josafat de Judá, estaban sentados en sus tronos en la era junto a la puerta de Samaria, con todos los profetas profetizando frente a ellos.


Salí a la puerta de la ciudad y me senté en la plaza pública.


“Si levantaba la mano para golpear a un huérfano, seguro de que si llegaba a los tribunales los jueces estarían de mi parte,


Las personas sentadas en las puertas de la cuidad inventan rumores sobre mi. Soy el objeto de burla de las canciones que cantan los borrachos.


Su esposo es respetado en el concilio a las puertas de la ciudad, donde se sienta con los ancianos.


Vengan todos los que tienen sed, vengan a beber el agua. Los que no tienen dinero, vengan, pueden comprar y comer. Vengan y compren vino y leche; no necesitan dinero; no cuesta nada.


Firmé la escritura y la sellé, hice que la atestiguaran y pesé la plata con la balanza.


Aborrezcan el mal y amen el bien. Asegúrense de que gane la justiciar en las cortes. Quizás el Señor Dios de poder tenga misericordia de los que quedan entre el pueblo de Jacob.


¡Corre! ¡Corre! Escapa de la tierra del norte, dice el Señor, porque yo te he dispersado a los cuatro vientos del cielo.


Elijan jueces y oficiales para cada una de sus tribus en cada pueblo que el Señor su Dios les dé. Deben juzgar a la gente con justicia.


deben hacer que el hombre o la mujer que ha cometido este terrible acto sea sacado del pueblo y apedreado hasta la muerte.


sus padres deben llevarlo a los ancianos del pueblo, al tribunal de su ciudad natal,


Sin embargo, si el hombre se niega a casarse con la viuda de su hermano, ella irá a los ancianos a la puerta del pueblo y les dirá: “El hermano de mi marido se niega a mantener vivo el nombre de su hermano en Israel. No quiere cumplir los requisitos de un cuñado para mí”.


Cuando llegue a una de estas ciudades, expondrá su caso a los ancianos a las puertas de la ciudad. Ellos deberán permitirle la entrada, y también le prepararán un lugar para alojarse.


Sin embargo, aunque soy uno de los redentores de tu familia, hay uno que está más emparentado que yo.


Noemí dijo a Rut: “Espera con paciencia, hija mía, hasta que sepas cómo se resuelve todo. Booz no descansará hasta tenerlo resuelto hoy”.


Síguenos en:

Anuncios


Anuncios


¡Síguenos en WhatsApp! Síguenos