Biblia Todo Logo
La Biblia Online
- Anuncios -





Apocalipsis 6:6 - Versión Biblia Libre

6 Y escuché lo que parecía una voz de entre las cuatro criaturas vivientes, que decía: “Dos libras de trigo cuestan el salario de un día, y tres libras de cebada cuestan lo mismo. Pero no dañen el aceite ni el vino.”

Ver Capítulo Copiar


Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

6 Y oí una voz de en medio de los cuatro seres vivientes, que decía: Dos libras de trigo por un denario, y seis libras de cebada por un denario; pero no dañes el aceite ni el vino.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Nueva Traducción Viviente

6 Y oí que una voz que salió de entre los cuatro seres vivientes decía: «Un pan de trigo o tres panes de cebada costarán el salario de un día. Y no desperdicies el aceite de oliva y el vino».

Ver Capítulo Copiar

Biblia Católica (Latinoamericana)

6 Entonces se escuchó una voz de en medio de los cuatro Seres que decía: 'Una medida de trigo por una moneda de plata; tres medidas de cebada por una moneda también; ya no gastes el aceite y el vino.

Ver Capítulo Copiar

La Biblia Textual 3a Edicion

6 Y oí como una voz en medio de los cuatro seres vivientes, que decía: Un cuartillo de trigo por un denario, y tres cuartillos de cebada por un denario; pero no dañes el aceite ni el vino.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Serafín de Ausejo 1975

6 Y oí como una voz en medio de los cuatro seres vivientes que decía: 'Una medida de trigo por denario; y tres medidas de cebada por denario. Pero el aceite y el vino no los dañes'.

Ver Capítulo Copiar




Apocalipsis 6:6
6 Referencias Cruzadas  

Incluso la ira humana contra ti te hace brillar, porque la usas como corona.


Habrá naciones que atacarán a otras naciones, y reinos que pelearán contra otros reinos. Habrá hambrunas y terremotos en diferentes lugares,


Y frente al trono se extendía un mar de vidrio, transparente como el cristal. En el centro, y alrededor del trono había cuatro criaturas vivientes cubiertas de ojos, por delante y por detrás.


Cada una de las cuatro criaturas vivientes tenía seis alas, que también estaban cubiertas de ojos. Día y noche decían sin parar: “Santo, santo, santo es el Señor Todopoderoso, que era, es y vendrá”.


“¡No le hagan daño a la tierra, ni al mar, ni a los árboles, hasta que hayamos puesto un sello en las frentes de los verdaderos seguidores de Dios!”


Se les dijo que no hicieran daño al pasto, ni a la vegetación, ni a los árboles, solo a aquellos que no tenían el sello de Dios sobre sus frentes.


Síguenos en:

Anuncios


Anuncios


¡Síguenos en WhatsApp! Síguenos