Biblia Todo Logo
La Biblia Online
- Anuncios -





2 Corintios 13:8 - Versión Biblia Libre

8 No podemos hacer nada contra la verdad, solo en favor de la verdad.

Ver Capítulo Copiar


Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

8 Porque nada podemos contra la verdad, sino por la verdad.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Nueva Traducción Viviente

8 Pues no podemos oponernos a la verdad, más bien siempre debemos defender la verdad.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Católica (Latinoamericana)

8 Pues no tenemos poder alguno contra la verdad, sino sólo a favor de ella,

Ver Capítulo Copiar

La Biblia Textual 3a Edicion

8 Porque nada podemos hacer° contra la verdad, sino a favor de la verdad.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Serafín de Ausejo 1975

8 Pues nada podemos contra la verdad, sino sólo a favor de la verdad.

Ver Capítulo Copiar




2 Corintios 13:8
20 Referencias Cruzadas  

“Si de hecho regresas sano y salvo, entonces el Señor no ha hablado a través de mí”, declaró Micaías. “¡Presten atención todos a todo lo que he dicho!”


Toda la sabiduría, entendimiento e instrucción que puedas lograr no son nada delante del Señor.


La maldición no caerá sobre la persona que no la merece. Será como el ave o la golondrina que revolotean.


“No lo detengan”, respondió Jesús. “Porque ninguno que esté haciendo milagros en mi nombre, puede maldecir al mismo tiempo.


Aunque pareciera que me enorgullezco mucho de nuestra autoridad, no me avergüenzo de ello. El Señor nos dio esta autoridad para edificarlos a ustedes, no para destruirlos.


Por eso les escribo sobre esto ahora que no estoy con ustedes, para que cuando sí esté allá, no tenga necesidad de tratarlos con dureza e imponiendo mi autoridad. El Señor me dio autoridad para edificar, no para destruir.


Rogamos a Dios que ustedes no hagan nada malo, no para que nosotros podamos mostrar que pasamos la prueba, sino para que ustedes puedan hacer lo recto, aunque nos haga parecer como un fracaso.


Nos alegra cuando somos débiles, y ustedes son fuertes. Oramos para que sigan mejorando.


Himeneo y Alexander son ejemplo de ello, y yo los he “entregado a Satanás” para que aprendan a no dar una mala imagen de Dios.


Síguenos en:

Anuncios


Anuncios


¡Síguenos en WhatsApp! Síguenos