Juan 2:4 - NT Traducción Contemporánea de la Biblia

⁴ Y Jesús le respondió: – ¿Qué tiene que ver eso conmigo y contigo, mujer?, todavía no ha llegado mi hora.

Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

⁴ Jesús le dijo: ¿Qué tienes conmigo, mujer? Aún no ha venido mi hora.

Biblia Nueva Traducción Viviente

⁴ —Apreciada mujer, ese no es nuestro problema —respondió Jesús—. Todavía no ha llegado mi momento.

Biblia Católica (Latinoamericana)

⁴ Jesús le respondió: 'Mujer, ¿por qué te metes en mis asuntos? Aún no ha llegado mi hora.

La Biblia Textual 3a Edicion

⁴ Jesús le dice: Mujer, ¿y a ti y a mí qué?° Aún no ha llegado mi hora.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

⁴ Pero Jesús le responde: '¿Qué nos va a mí y a ti, mujer? Todavía no ha llegado mi hora'.

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

⁴ Jesús le dijo: ¿Qué tengo yo contigo, mujer? Aún no ha venido mi hora.

Juan 2:4 Referencias Cruzadas

Mateo 15:28

Luego Jesús le dijo: – ¡Oh mujer! Grande es tu fe, que el deseo de tu corazón se haga realidad. Y su hija fue sanada en ese momento.

Mateo 8:29

Y los dos endemoniados le gritaron: – ¡Hijo de Dios!, ¿qué tienes contra nosotros?, ¿acaso tú viniste a este lugar para atormentarnos antes de tiempo?

Lucas 2:49

Jesús les contestó: – ¿Por qué me estaban buscando? ¿ustedes no saben que es necesario que yo me ocupe con las cosas de mi Padre?

Juan 12:23

Y Jesús les respondió: – Ha llegado la hora para que sea glorificado el Hijo del Hombre a través de su muerte y resurrección.

Juan 13:1

Antes de la fiesta de la Pascua, sabiendo Jesús que la hora para regresar al Padre había llegado, y habiendo amado sacrificialmente a su gente, a los que estaban con Él en este mundo, los amó extremadamente.

Juan 2:3

Faltando el vino, la madre de Jesús le dijo: – Ya no hay vino.

Juan 20:13

y los ángeles le dijeron: – ¡Mujer!, ¿por qué lloras? Ella respondió: – Porque se llevaron el cuerpo de mi Señor, y no sé dónde lo colocaron.

Juan 20:15

Le dijo Jesús: – ¡Mujer!, ¿por qué lloras? ¿A quién buscas? Ella pensó que él era el que cuidaba el huerto, y le dijo: – ¡Señor!, si tú te lo llevaste, dime dónde lo pusiste, para llevármelo.

Juan 7:30

Entonces intentaron arrestarlo, pero nadie puso su mano sobre Él, pues aún no había llegado su hora.

Juan 7:6

Entonces, Jesús les respondió: – No me presionen, mi tiempo aún no ha llegado, no me impongan su tiempo.

Juan 7:8

Ustedes vayan a Jerusalén para que celebren la fiesta; yo no subo todavía porque mi tiempo no ha llegado.

Juan 8:20

Estas enseñanzas las dio en el lugar donde se recogen las ofrendas del templo; y nadie intentó arrestarlo, pues aún no había llegado su hora.

2 Corintios 5:16

Así que de ahora en adelante no consideramos a nadie según criterios meramente humanos. Aunque antes conocimos a Cristo de esta manera, ya no lo conocemos así.