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Marcos 5:43 - Nueva Versión Internacional 2019 (simplificada - Nuevo Testamento)

43 Él dio órdenes estrictas de que nadie se enterara de lo ocurrido. Luego les mandó que le dieran de comer a la niña.

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Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

43 Pero él les mandó mucho que nadie lo supiese, y dijo que se le diese de comer.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

43 Jesús dio órdenes estrictas de que no le dijeran a nadie lo que había sucedido y entonces les dijo que le dieran de comer a la niña.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

43 Pero Jesús les pidio insistentemente que no lo contaran a nadie, y les dijo que dieran algo de comer a la niña.

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La Biblia Textual 3a Edicion

43 Y Él les ordenó severa y repetidamente que nadie supiera esto, y dijo que se le diera° de comer.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

43 Pero él les recomendó encarecidamente que nadie lo viniera a saber; y dijo que le dieran de comer a la niña.

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Marcos 5:43
15 Referencias Cruzadas  

Mientras bajaban de la montaña, Jesús les encargó: ―No le cuenten a nadie lo que han visto hasta que el Hijo del hombre se levante de entre los muertos.


―Mira, no se lo digas a nadie —le dijo Jesús—. Solo ve, preséntate al sacerdote y lleva la ofrenda que ordenó Moisés, para que les sirva de testimonio.


Y recobraron la vista. Jesús les dijo con firmeza: ―Asegúrense de que nadie se entere de esto.


Jesús lo despidió en seguida con una fuerte advertencia:


Pero él les ordenó terminantemente que no dijeran quién era él.


La niña, que tenía doce años, se levantó en seguida y comenzó a andar. Ante este hecho todos se llenaron de asombro.


Jesús les mandó que no se lo dijeran a nadie, pero cuanto más se lo prohibía, tanto más lo seguían propagando.


Mientras bajaban de la montaña, Jesús les ordenó que no contaran a nadie lo que habían visto hasta que el Hijo del hombre se levantara de entre los muertos.


Luego, estando con ellos a la mesa, tomó el pan, lo bendijo, lo partió y se lo dio.


―No se lo digas a nadie —le ordenó Jesús—. Solo ve, preséntate al sacerdote y lleva por tu sanidad la ofrenda que ordenó Moisés. Eso les servirá de testimonio.


Los padres se quedaron asombrados, pero él les dijo que no contaran a nadie lo que había sucedido.


»No me interesa que la gente me rinda honor.


pero no a todos. Se apareció a nosotros, testigos previamente elegidos por Dios. Sí, a nosotros, los que comimos y bebimos con él después de su resurrección.


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