Hebreos 10:22 - Nueva Versión Internacional 2019 (simplificada - Nuevo Testamento)22 Acerquémonos entonces a Dios con corazón sincero y con la completa seguridad que da la fe. Cristo nos ha limpiado de pecado, como quien es bañado con agua pura. Por eso, acerquémonos con una conciencia tranquila. Ver CapítuloMás versionesBiblia Reina Valera 196022 acerquémonos con corazón sincero, en plena certidumbre de fe, purificados los corazones de mala conciencia, y lavados los cuerpos con agua pura. Ver CapítuloBiblia Nueva Traducción Viviente22 entremos directamente a la presencia de Dios con corazón sincero y con plena confianza en él. Pues nuestra conciencia culpable ha sido rociada con la sangre de Cristo a fin de purificarnos, y nuestro cuerpo ha sido lavado con agua pura. Ver CapítuloBiblia Católica (Latinoamericana)22 acerquémonos con corazón sincero, con fe plena, limpios interiormente de todo lo que mancha la conciencia y con el cuerpo lavado con agua pura. Ver CapítuloLa Biblia Textual 3a Edicion22 acerquémonos con corazón sincero, en plena certidumbre de fe, teniendo los corazones° rociados, y así libres° de mala conciencia, y los cuerpos lavados con agua pura.° Ver CapítuloBiblia Serafín de Ausejo 197522 Acerquémonos, pues, con corazón sincero y fe plena, purificado el corazón de toda impureza de conciencia y lavado el cuerpo con agua pura. Ver Capítulo |
Dios nos dio la Ley como una manera de mostrarnos todo lo bueno que pensaba darnos luego. No era eso lo que en verdad pensaba darnos. Es por eso por lo que la Ley nunca puede hacer perfectos a los que se acercan a Dios. Siguiendo la Ley, los sacerdotes ofrecían los mismos sacrificios sin cesar año tras año, pero no pudieron hacer a nadie perfecto.