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Proverbios 2:6 - Biblia Nueva Versión Internacional 2022

6 Porque el Señor da la sabiduría; conocimiento e inteligencia brotan de sus labios.

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Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

6 Porque Jehová da la sabiduría, Y de su boca viene el conocimiento y la inteligencia.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

6 ¡Pues el Señor concede sabiduría! De su boca provienen el saber y el entendimiento.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

6 Porque Yavé da la sabiduría, de su boca salen el saber y la verdad.

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La Biblia Textual 3a Edicion

6 Porque YHVH da la sabiduría, De su boca procede la ciencia y la inteligencia.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

6 porque es Yahveh quien da la sabiduría, de su boca brotan la ciencia y la prudencia.

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Proverbios 2:6
32 Referencias Cruzadas  

Todo el mundo procuraba visitarlo para oír la sabiduría que Dios le había dado.


voy a concederte lo que has pedido. Te daré un corazón sabio y prudente, como nadie antes de ti lo ha tenido ni lo tendrá después.


Yo te ruego que des a tu siervo discernimiento para gobernar a tu pueblo y para distinguir entre el bien y el mal. De lo contrario, ¿quién podrá gobernar a este gran pueblo tuyo?».


Dios dio a Salomón sabiduría e inteligencia extraordinarias; sus conocimientos eran tan vastos como la arena que está a la orilla del mar.


Que te dé prudencia y sabiduría para que, cuando estés al frente de Israel, obedezcas su ley. Él es el Señor tu Dios.


Por cuanto tú, Esdras, posees la sabiduría de Dios, serás el encargado de nombrar funcionarios y jueces para que juzguen a los habitantes de la provincia al oeste del río Éufrates, es decir, a todos los que conocen las leyes de tu Dios. Pero, a quienes no la conozcan, enséñasela.


Mi Dios puso en mi corazón el deseo de reunir a los nobles, a los oficiales y al pueblo, para registrarlos según su descendencia; y encontré el registro genealógico de los que habían regresado en la primera repatriación. Allí estaba escrito:


»Con Dios están la sabiduría y el poder; suyos son el consejo y el entendimiento.


Suyos son el poder y el buen juicio; suyos son los engañados y los que engañan.


Acepta la enseñanza que mana de su boca; grábate sus palabras en tu corazón.


Pero lo que da entendimiento al hombre es el espíritu que en él habita; ¡es el aliento del Todopoderoso!


De tus preceptos adquiero entendimiento; por eso aborrezco toda senda de mentira.


Dame entendimiento para seguir tu Ley y la cumpliré de todo corazón.


Tus mandamientos me hacen más sabio que mis enemigos, porque siempre están conmigo.


La Ley del Señor es perfecta: infunde nuevo aliento. El mandato del Señor es digno de confianza: da sabiduría al sencillo.


Los preceptos del Señor son rectos: traen alegría al corazón. El mandamiento del Señor es claro: da luz a los ojos.


Yo sé que tú amas la verdad en lo íntimo; en lo secreto me has enseñado sabiduría.


¿Y no habrá de castigar el que corrige a las naciones e imparte conocimiento a todo ser humano?


y lo he llenado del Espíritu de Dios, de sabiduría, inteligencia y capacidad creativa


El mandamiento es una lámpara, la enseñanza es una luz y la disciplina es el camino a la vida.


En realidad, Dios da sabiduría, conocimientos y alegría a quien es de su agrado; en cambio, al pecador le impone la tarea de acumular más y más, para luego dárselo todo a quien es de su agrado. Y también esto es vanidad; ¡es correr tras el viento!


El Señor instruirá a todos tus hijos y grande será su paz.


yo les digo: «¡Aténganse a la Ley y al testimonio!». Para quienes no se atengan a esto no habrá un amanecer.


A estos cuatro jóvenes Dios los dotó de sabiduría e inteligencia para entender toda clase de literatura y ciencia. Además, Daniel podía entender toda visión y todo sueño.


Él cambia los tiempos y las épocas, pone y depone reyes. A los sabios da sabiduría y a los inteligentes, discernimiento.


A ti, Dios de mis antepasados, te alabo y te doy gracias. Me has dado sabiduría y poder; me has dado a conocer lo que te pedimos. ¡Nos has dado a conocer el sueño del rey!».


pues yo mismo les daré tal elocuencia y sabiduría para responder que ningún adversario podrá resistirles ni contradecirles.


En los Profetas está escrito: “A todos los instruirá Dios”. En efecto, todo el que escucha al Padre y aprende de él viene a mí.


Toda buena dádiva y toda perfecta bendición descienden de lo alto, donde está el Padre que creó las lumbreras celestes, y quien no cambia ni se mueve como las sombras.


Si a alguno de ustedes le falta sabiduría, pídasela a Dios y él se la dará, pues Dios da a todos generosamente sin menospreciar a nadie.


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