Jueces 20:13 - Biblia Nueva Versión Internacional 202213 Entreguen ahora a esos hombres perversos de Guibeá para que los matemos y eliminemos así la maldad en Israel». Pero los de la tribu de Benjamín no quisieron hacerles caso a sus hermanos israelitas. Ver CapítuloMás versionesBiblia Reina Valera 196013 Entregad, pues, ahora a aquellos hombres perversos que están en Gabaa, para que los matemos, y quitemos el mal de Israel. Mas los de Benjamín no quisieron oír la voz de sus hermanos los hijos de Israel, Ver CapítuloBiblia Nueva Traducción Viviente13 Entréguennos a esos hombres malvados, a esos perturbadores de Guibeá, para que los ejecutemos y así purifiquemos a Israel de semejante maldad». Pero los de Benjamín no quisieron escuchar. Ver CapítuloBiblia Católica (Latinoamericana)13 Entréguennos a esos criminales de Guibea para que los matemos, porque hay que eliminar el mal de Israel'. Pero la gente de Benjamín no quiso oír la voz de sus hermanos israelitas. Ver CapítuloLa Biblia Textual 3a Edicion13 Ahora pues, entregad a los hombres, aquellos hijos de Belial que están en Gabaa, para que les demos muerte y extirpemos esta infamia de Israel. Pero los hijos de Benjamín no quisieron escuchar la voz de sus hermanos los hijos de Israel. Ver CapítuloBiblia Serafín de Ausejo 197513 Entregadnos a esos hombres hijos de Belial que hay en Guibeá; los ejecutaremos y así quedará extirpada de Israel la maldad'. Pero los benjaminitas no quisieron escuchar la voz de sus hermanos, los israelitas. Ver CapítuloBiblia Reina Valera Gómez (2023)13 Entregad, pues, ahora aquellos hombres, hijos de Belial, que están en Gabaa, para que los matemos, y barramos el mal de Israel. Mas los de Benjamín no quisieron oír la voz de sus hermanos los hijos de Israel. Ver Capítulo |
Condenarás a muerte a ese profeta o soñador por haberte aconsejado rebelarte contra el Señor tu Dios, que te sacó de Egipto y te rescató de la tierra de esclavitud. Así erradicarás el mal que haya en medio de ti, porque tal profeta habrá intentado apartarte del camino que el Señor tu Dios te mandó que siguieras.