Biblia Todo Logo
La Biblia Online
- Anuncios -





Juan 18:20 - Biblia Nueva Versión Internacional 2022

20 —Yo he hablado abiertamente al mundo —respondió Jesús—. Siempre he enseñado en las sinagogas o en el Templo, donde se congregan todos los judíos. En secreto no he dicho nada.

Ver Capítulo Copiar


Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

20 Jesús le respondió: Yo públicamente he hablado al mundo; siempre he enseñado en la sinagoga y en el templo, donde se reúnen todos los judíos, y nada he hablado en oculto.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Nueva Traducción Viviente

20 Jesús contestó: «Todos saben lo que enseño. He predicado con frecuencia en las sinagogas y en el templo, donde se reúne el pueblo. No he hablado en secreto.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Católica (Latinoamericana)

20 Yo he hablado abiertamente al mundo. He enseñado constantemente en los lugares donde los judíos se reúnen, tanto en las sinagogas como en el Templo, y no he enseñado nada en secreto.

Ver Capítulo Copiar

La Biblia Textual 3a Edicion

20 Jesús le respondió: Yo he hablado públicamente al mundo. Enseñaba siempre en las sinagogas y en el templo, donde se reúnen todos los judíos, y nada he hablado en oculto.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Serafín de Ausejo 1975

20 Jesús le respondió: 'Yo he hablado públicamente a la vista de todo el mundo; siempre he enseñado en la sinagoga y en el templo, donde se reúnen todos los judíos, y no he dicho nada en la clandestinidad.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

20 Jesús le respondió: Yo manifiestamente he hablado al mundo; yo siempre he enseñado en la sinagoga y en el templo, donde siempre se reúnen los judíos, y nada he hablado en oculto.

Ver Capítulo Copiar




Juan 18:20
25 Referencias Cruzadas  

Proclamaré tu nombre a mis hermanos; en medio de la congregación te alabaré.


En medio de la gran asamblea he proclamado tu justicia. Tú bien sabes, Señor, que no he sellado mis labios.


Desde ningún lugar de esta tierra tenebrosa les he hablado en secreto. Ni he dicho a los descendientes de Jacob: “Búsquenme en vano”. Yo, el Señor, digo lo que es justo y declaro lo que es recto.


»Acérquense a mí, escuchen esto: »Desde el principio, jamás hablé en secreto; cuando las cosas suceden, allí estoy yo». Y ahora el Señor y Dios me ha enviado con su Espíritu.


»Por eso, si les dicen: “¡Miren que está en el desierto!”, no salgan; o: “¡Miren que está en la casa!”, no lo crean.


Y de inmediato dijo a la turba: —¿Acaso soy un bandido para que vengan con espadas y palos a arrestarme? Todos los días me sentaba a enseñar en el Templo y no me arrestaron.


—¡Ha blasfemado! —exclamó el sumo sacerdote, rasgándose las vestiduras—. ¿Para qué necesitamos más testigos? ¡Miren, ustedes mismos han oído la blasfemia!


Jesús recorría toda Galilea enseñando en las sinagogas, anunciando las buenas noticias del reino y sanando toda enfermedad y dolencia entre la gente.


Jesús recorría todos los pueblos y aldeas enseñando en las sinagogas, anunciando las buenas noticias del reino, y sanando toda enfermedad y toda dolencia.


Habló de esto con toda claridad. Pedro lo llevó aparte y comenzó a reprenderlo.


De día Jesús enseñaba en el Templo, pero salía a pasar la noche en el monte llamado de los Olivos


Enseñaba en las sinagogas y todos lo admiraban.


¿Por qué me interrogas a mí? ¡Interroga a los que me han oído hablar! Ellos deben saber lo que dije.


Todo esto lo dijo Jesús mientras enseñaba en la sinagoga de Capernaúm.


Jesús esperó hasta la mitad de la fiesta para subir al Templo y comenzar a enseñar.


Ahí está, hablando abiertamente y nadie le dice nada. ¿Será que las autoridades se han convencido de que es el Cristo?


Por eso Jesús, que seguía enseñando en el Templo, exclamó: —¡Conque ustedes me conocen y saben de dónde vengo! No he venido por mi propia cuenta, sino que me envió uno que es digno de confianza. Ustedes no lo conocen,


porque nadie que quiera darse a conocer actúa en secreto. Ya que haces estas cosas, deja que el mundo te conozca.


Al amanecer se presentó de nuevo en el Templo. Toda la gente se le acercó, y él se sentó a enseñarles.


Son muchas las cosas que tengo que decir y juzgar de ustedes. Pero el que me envió es veraz, y lo que le he oído decir es lo mismo que le repito al mundo.


El rey está familiarizado con estas cosas y por eso hablo ante él con tanto atrevimiento. Estoy convencido de que nada de esto ignora, porque no sucedió en un rincón.


Síguenos en:

Anuncios


Anuncios


¡Síguenos en WhatsApp! Síguenos