Biblia Todo Logo
La Biblia Online
- Anuncios -





Juan 14:24 - Biblia Nueva Versión Internacional 2022

24 El que no me ama, no obedece mis palabras. Pero estas palabras que ustedes oyen no son mías, sino del Padre que me envió.

Ver Capítulo Copiar


Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

24 El que no me ama, no guarda mis palabras; y la palabra que habéis oído no es mía, sino del Padre que me envió.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Nueva Traducción Viviente

24 El que no me ama no me obedece. Y recuerden, mis palabras no son mías; lo que les hablo proviene del Padre, quien me envió.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Católica (Latinoamericana)

24 El que no me ama no guarda mis palabras; pero el mensaje que escuchan no es mío, sino del Padre que me ha enviado.

Ver Capítulo Copiar

La Biblia Textual 3a Edicion

24 El que no me ama, no guarda mis palabras; y la palabra que oís no es mía, sino del Padre que me envió.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Serafín de Ausejo 1975

24 El que no me ama, no guarda mis palabras. La palabra que estáis oyendo no es mía, sino del Padre que me ha enviado'.

Ver Capítulo Copiar

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

24 El que no me ama, no guarda mis palabras; y la palabra que habéis oído no es mía, sino del Padre que me envió.

Ver Capítulo Copiar




Juan 14:24
19 Referencias Cruzadas  

Jesús respondió: —Si quieres ser perfecto, anda, vende lo que tienes y dáselo a los pobres, y tendrás tesoro en el cielo. Luego ven y sígueme.


¿Acaso no crees que yo estoy en el Padre y que el Padre está en mí? Las palabras que yo les comunico, no las hablo como cosa mía, sino que es el Padre que está en mí, quien realiza sus obras.


»Si ustedes me aman, obedecerán mis mandamientos.


»Todo esto lo digo ahora que estoy con ustedes.


Te aseguro que hablamos de lo que sabemos y damos testimonio de lo que hemos visto, pero ustedes no aceptan nuestro testimonio.


El enviado de Dios comunica el mensaje divino, pues Dios mismo le da su Espíritu sin restricción.


Entonces Jesús afirmó: —Les aseguro que el Hijo no puede hacer nada por su propia cuenta, sino solamente lo que ve que su Padre hace, porque cualquier cosa que hace el Padre, la hace también el Hijo.


ni vive su palabra en ustedes, porque no creen en aquel a quien él envió.


—Mi enseñanza no es mía —respondió Jesús—, sino del que me envió.


Por eso Jesús, que seguía enseñando en el Templo, exclamó: —¡Conque ustedes me conocen y saben de dónde vengo! No he venido por mi propia cuenta, sino que me envió uno que es digno de confianza. Ustedes no lo conocen,


Son muchas las cosas que tengo que decir y juzgar de ustedes. Pero el que me envió es veraz, y lo que le he oído decir es lo mismo que le repito al mundo.


Por eso Jesús añadió: —Cuando hayan levantado al Hijo del hombre, sabrán ustedes que yo soy y que no hago nada por mi propia cuenta, sino que hablo conforme a lo que el Padre me ha enseñado.


Yo hablo de lo que he visto en presencia del Padre; y ustedes hacen lo que de su padre han escuchado.


—Si Dios fuera su Padre —contestó Jesús—, ustedes me amarían, porque yo he venido de Dios y aquí me tienen. No he venido por mi propia cuenta, sino que él me envió.


Síguenos en:

Anuncios


Anuncios


¡Síguenos en WhatsApp! Síguenos